Era el año 2000 y el ambiente electoral era cada vez más raro, nadie sabía que pasaría en las elecciones presidenciales de ese año, sobre todo en los colegios de historia. Por aquellos años yo cursaba mi último año y la UNAM se encontraba casi paralizada por el secuestro que había sufrido a mediados de 1999 y la entrada de la entonces PFP al campus universitario.
En la cuenca del rio Usumacinta, parte de la selva Lacandona, el Lagarto ganador de las elecciones presidenciales de México, afirmo sembrará árboles maderables y frutales.
La persona corrupta vive una mentira. La justifica y la vive. No está satisfecha y mucho menos contenta con la situación que vive. En su interior, se anidan sentimientos encontrados.
El término es brutal. Lo sé. Pero los efectos que la violencia ocasiona en el país nuevamente son igualmente brutales. Una cosa es hablar de corrupción y otra de violencia. Están emparentadas, claro.
La violencia es un problema que no hace diferencias en estatus social y económico, ni cultural, mucho menos en edad y género.
Andrés Manuel López Obrador es hoy el puntero en la carrera presidencial. Como en 2005 y 2011, se coloca en la delantera porque es el segundo político más conocido del país, al que ha recorrido en una campaña incesante que entra en su año décimo tercero (esto es, desde 2004). Será candidato por tercera vez, ahora con su propio partido político y bajo su control absoluto. Como en ocasiones anteriores, la cercanía de ese Palacio Nacional por el que sueña lo lleva a ensorbecerse y erigirse en el salvador que México tanto necesita. En lo político, ello generalmente lo lleva a insultar a los contrarios; en lo económico, a prometer dislates sin fin.
Josep de Maistre (1753-1821) decía que cada pueblo (nación o país) tiene el gobierno que merece, y sinceramente concuerdo más con la mejora que le dio a ese célebre pensamiento, su paisano André Malraux (19021-1976) quien sostuvo que no es que los pueblos tengan el gobierno que se merecen, sino que únicamente el pueblo tiene el gobernante que más se le parece.
Durante años los amos del futbol, hablaban de héroes que llegaban de la nada a cambiar la historia de las ligas, la historia de los pueblos y que marcaban una generación. Esos fueron hombres como Pele, Maradona, Alfredo Di Stefano, Hugo Sánchez y un mismo Cristiano Ronaldo. Seres de otro mundo, de un universo donde el futbol es una religión y donde jugarlo, es la más grande pasión que existe: Esta es la historia de una “Pulga” de un tal Lionel Messi.
Todas las personas creemos en algo o en alguien. Hasta hace poco más de medio siglo, lo más común a todos era creer en DIOS. En el de la Biblia.
El reloj de pared marcaba las escasas tres primeras horas con dieciocho minutos del miércoles y Luis no había tenido oportunidad de dormir más de 30 minutos seguidos.
Realidad 7 es un sitio de noticias de corte político y periodismo digital.
Nuestra misión es llevar a la comodidad de tus dispositivos la información más relevante que sucede en el campo político de nuestro país.
Contacto: info@realidad7.com