- En un frente a frente el PAN obtiene más votación que MORENA
- El PRI sobrevive a esta elección
- Morena le quita las dos coronas al PAN
Luego de celebrarse las elecciones de este domingo dos de junio donde se disputaron 148 cargos de elección popular en 6 estados del país, los números arrojados por el Programa de Resultados Preliminares (PREP) dejan muchas conclusiones dependiendo el punto desde el que se mire.
Y es que este domingo, estuvieron en juego 11 ayuntamientos en Aguascalientes, en Baja California los ciudadanos renovaron la gubernatura, 5 alcaldías y 25 curules del Congreso estatal, en Durango se eligieron 39 ayuntamientos, en Puebla se celebró la elección extraordinaria para gobernador tras el trágico accidente que sufrió la gobernadora electa Martha Erika Alonso Hidalgo, en Quintana Roo y Tamaulipas se renovaron los congresos locales con 25 y 34 curules respectivamente.
Ahora bien, los datos del PREP arrojan que en una sumatoria realizada por esta casa editorial digital, el partido en el poder MORENA (Movimiento de Regeneración Nacional) no arrasó pese a la popularidad del Presidente Andrés Manuel López Obrador, mientras que el Partido Acción Nacional (PAN) mostró una recuperación considerable en comparación con la elección del año pasado.
En los números, el Partido Revolucionario Institucional muestra una seria crisis electoral pues se colocó en esta elección como la tercera fuerza política, por detrás de MORENA y el PAN quienes se colocan como primera y segunda opción electoral respectivamente.
En los datos duros arrojados por el PREP y al margen de que la autoridad electoral confirme los resultados emitidos en las próximas horas, el Partido Acción Nacional se colocaría como el ganador en cuanto a votación obtenida, ya que alcanzó un total de 1 millón 252 mil 819 sufragios en una sumatoria de todas las entidades, mientras que MORENA obtendría un total de 1 millón 128 mil 922 votos y en un muy lejano tercer lugar el PRI con 602 mil 772 votos.
Increíblente, el partido del trabajo (PT) el cual ya se encontraba en vías de extinción, se colocó como la cuarta fuerza política con 254 mil 195 votos, seguido del Movimiento Ciudadano con 220 mil 31 sufragios, en el sexto lugar se posiciona el Partido Verde Ecologista de México con 196 mil 531 votos, seguido de un agonizante Partido de la Revolución Democrática (PRD) con apenas 150 mil 362 votos.
Cabe destacar que en esta elección, se presentaron fenómenos que son dignos de analizar por los estrategas electorales de los partidos políticos, y es que mientras en Baja California, la coalición de MORENA – PVEM – PT y un partido local ganaron la totalidad del congreso del estado y las 5 alcaldías, así como la gubernatura, en Puebla si hubieran competido solos los partidos políticos, el PAN se habría alzado con la victoria pues por partido, el PAN le ganó a MORENA por 23 mil 551 votos, sin embargo, las coaliciones salvaron al partido del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
En Tamaulipas, donde se renovó el congreso local, el PAN se levantó con la victoria en 21 distritos electorales, mientras que MORENA apenas alcanzó a ganar en 1 distrito de forma apretada, en tanto que el PRI y las otras fuerzas políticas fueron desaparecidas del mapa.
En Aguascalientes el PAN también se alzó con la victoria ganando 5 de los 11 ayuntamientos que se disputaron, entre ellos la capital de la entidad, de ahí, el PVEM le seguiría con 2 alcaldías, mientras que el PRI, MORENA, PRD y partido del trabajo se quedarían sólo con 1 ayuntamiento.
En Quintana Roo, los datos muestran cómo la coalición conformada por MORENA, el PVEM y el PT, se alzaron con la victoria al obtener 11 de las 15 curules disputadas, mientras que la coalición del PAN, PRD y Partido Encuentro Social con 3 distritos y el PRI con 1.
En Durango, de los 39 ayuntamientos que se disputaron el PRI sin alianza obtuvo 16 alcaldías, el mismo número de alcaldías que ganó la coalición del PAN-PRD, además de que el PAN sin coalición ganó 2 municipios, es decir, 18 en total. Por su parte MORENA apenas alcanzó a ganar 2 ayuntamientos, en tanto que el PVEM, MC, PT y el Partido Duranguense (local), ganaron 1 ayuntamiento cada uno.
Estos números sin duda dejan muchas conclusiones y debates respecto al verdadero ganador de la elección, sin embargo, el gran ganador fue el abstencionismo y la apatía del ciudadano respecto a involucrarse en las decisiones ciudadanas.
De acuerdo al PREP, donde más participación hubo del electorado fue en Durango, alcanzando el 45.34% de participación de ciudadanos inscritos en la lista nominal, la segunda entidad donde más participación hubo fue en Aguascalientes con un 38.98% es decir, casi 4 de cada 10 ciudadanos salieron a votar.
En un tercer lugar se encuentra Puebla con una participación del 33.41%, seguido de Tamaulipas con un 33.15%, en tanto que Baja California apenas rayó el 29.95% de electores votando en las urnas y por último, Quintana Roo con un raquítico 22.15%, lo que significa que 20 de cada 100 quintanaroenses acudieron a votar.
Como podemos observar, los datos y los números pueden analizarse dependiendo el cristal con el que se miren, sin embargo, 3 cosas son muy claras, el PAN es el gran perdedor de la contienda al no poder mantener una gubernatura que ya tenían en la bolsa como lo era Puebla, así como su bastión de más de 30 años en Baja California al dejarlo en manos del impresentable Jaime Bonilla Valdéz, quien ha sido señalado en múltiples veces por corrupción y patrocinio económico en la campaña de Donald Trump.
Morena también es el gran perdedor de la elección pues los datos y números fríos demuestran que Acción Nacional le ganó en cuanto a opción electoral y pone en tela de juicio el actuar de figuras políticas como la Presidenta del Movimiento de Regeneración Nacional (morena) Yeidckol Polevnsky, mejor conocida como Citlali Ibáñez, al mismo tiempo de prender las alarmas en palacio nacional, pues al parecer, la fortaleza del Presidente Andrés Manuel y el rechazo a decisiones polémicas como los despidos masivos, recortes presupuestales y hasta cancelación de programas de apoyo como lo son las estancias infantiles, le cobraron la factura a MORENA.
El PRI si bien no está acabado, se encuentra en una fase de agonía crítica tras colocarse en esta elección como tercera fuerza política en esta elección, viéndose envuelto en una seria crisis de credibilidad interna por la pronta elección de la nueva dirigencia.
Por último, dicen que la victoria es de todos pero la derrota es huérfana y en este tenor, si hubiera autocrítica en las tres principales fuerzas políticas del país, tanto el dirigente del PAN Marko Cortés, como la Presidenta del PRI Claudia Ruíz Massieu así como Yeidckol Polevnsky deberían presentar de forma inmediata su renuncia por su alto grado de responsabilidad en los resultados donde el único ganador fue el abstencionismo, tras no presentar propuestas políticas que convencieran al electorado no sólo de votar por sus partidos políticos, sino de acudir a las urnas.
Los datos aquí escritos los puedes consultar en estas ligas:
