Durante la semana pasada, la escudería Ferrari festejó sus 90 años de existencia y el domingo redondeó la fiesta con el aporte del piloto monegasco Charles Leclerc, quien le devolvió la gloria a su escudería en la victoria del Gran Premio de Italia, la décima cuarta cita de la Temporada 2019 de Fórmula 1.
El Circuito de Monza vio la segunda victoria consecutiva de la joven promesa de 21 años en el automovilismo, ya que subió a lo más alto del podio la semana pasada en Bélgica, y este domingo lo hizo con categoría, aún con la presión que siempre le generaron los Mercedes, con el finlandés Valtteri Bottas y el británico Lewis Hamilton.
Este triunfo en Monza fue el primero en nueve años para Ferrari. Desde el 2010, con Fernando Alonso, el equipo de Maranello no lograba vencer en su casa, en el templo de la velocidad.
Aunado a que prácticamente desde la vuelta siete, de 53 programadas, Leclerc quedó solo, sin su compañero alemán Sebastian Vettel, quien protagonizó un trompo, más una sanción de 10 segundos que lo dejó fuera de la zona de puntos. El teutón ahora no pudo proteger al monegasco como sucedió en algunas vueltas en Spa.
Así el joven tuvo que demostrar sus dotes y consolidarse dentro de la F1; arrancó desde la “pole position” y la mantuvo en las primeras vueltas por delante de Hamilton, Bottas y el alemán Nico Hulkenberg (Renault), quien de inmediato superó a Vettel, que más tarde desaparecía de los primeros sitios.
A record 200,000 fans came to Monza this weekend!
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