Mientras Andrés Manuel López Obrador recorre el país como el candidato favorito, las encuestas dan al dirigente de Morena como el que más crece y en primer lugar, el resto de los partidos mueve a sus aspirantes a la Presidencia y lanzan señales para ser tomados en cuenta como contendientes fuertes, capaces de ganar las elecciones de 2018.
En la última semana, el Revolucionario Institucional (PRI) conmemoró el XXIII Aniversario del magnicidio del último líder carismático que tuvo, Luis Donaldo Colosio, presentando como uno de los fuertes aspirantes en la sucesión de Peña Nieto, al secretario de Salud, José Narro Robles.
El Partido Acción Nacional (PAN), por su parte, lleva a cabo una consulta a su militancia para conocer su opinión sobre el proceso federal de 2018. En ella pregunta cuál debería ser el método de selección de candidatos, entre los que se encuentra el candidato a la Presidencia de la República.
Vapuleado y todo el Partido de la Revolución Democrática (PRD) dejó fuera de la coordinación de los senadores al poblano Luis Miguel Barbosa y con sus canicas, aunque contadas y sin mayores posibilidades, empezó a construir la candidatura de Miguel Ángel Mancera, quien sin ser militante perredista busca cohesionar a otros grupos y organizaciones que integren un polo de izquierda para competir con posibilidades.
El priista Narro aseguró que México transita por una encrucijada y saldrá adelante, “lo hará porque tenemos el legado de Luis Donaldo Colosio, porque entraremos en una nueva etapa de la lucha: la del inescapable desarrollo regional, la del fortalecimiento de los valores laicos, la de la justicia social, la lucha por la libertad, la democracia y el cumplimiento del Estado de derecho”.
Narro Robles aseguró que en el PRI caben todos y solo “sobran” quienes piensan sólo en ellos, “los que promueven la división y el enfrentamiento, los que sueñan y anhelan el regreso al pasado, sin entender que el mundo ya cambió y que ese pasado es historia”, resaltó frente al busto de Colosio y la dirigencia nacional priista.
Narro está incluido en la terna de los priistas que buscan la candidatura presidencial, junto con Miguel Ángel Osorio Chong y Luis Videgaray. A estas alturas será muy difícil que aumente y el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila está lejos de integrarse, antes llegará al gabinete.
Los panistas entraron en momentos de definiciones. Con base en sus estatutos para ser candidato presidencial hay dos métodos: elección interna de los militantes y designación.
Sin embargo, el cuestionario de opciones múltiples especifica cuatro: designación a través de acuerdo de los liderazgos, elección interna, elección abierta a la ciudadanía y encuestas de opinión.
La consulta se encuentra en la página oficial de la Fundación Rafael Preciado, que contados panistas han revisado, interroga si el blanquiazul debería ir en el proceso electoral de 2018 en alianza o solo, así como con los partidos con los que podría acordar.
El cuestionario sólo lo pueden responder los militantes, solicitan la clave de elector y está establecido como obligatorio en el artículo 91 de los estatutos partidistas. Es el que demandaban los 17 panistas firmantes que apoyan la candidatura presidencial de Margarita Zavala.
La consulta, que publicó ayer El Universal, empezó en diciembre de 2016 y concluye en noviembre próximo, cuando arranca el proceso interno para la selección de candidatos, entre los que se encuentra el de la Presidencia de la República.
El ejercicio no tiene carácter de vinculante. Las respuestas son consideradas en la construcción de la plataforma electoral, y en la decisión que tomará la Comisión Permanente Nacional, con respecto a la selección del método de candidaturas.
Moreno Valle ha insistido en una consulta abierta a la población y por lo menos a las bases panistas, mientras Zavala de Calderón espera que la decisión del Consejo Político Nacional la favorezca a partir de las encuestas que la colocan como favorita. Anaya, señalan sus más cercanos colaboradores, en los dos va a ganar porque tiene los amarres para hacerlo y podría ser el primero en proponer la consulta a las bases panistas, como una iniciativa propia desde su posición de dirigente nacional, con lo que le mostraría los dientes al poblano.
Mientras eso sucede y los perredistas no terminan por salir del berenjenal que continuará esta semana, Miguel Ángel Mancera decidió trabajar con el PRD en la construcción de un polo alterno de izquierda, al que se sumen otros partidos y organizaciones para competir en las elecciones presidenciales del 2018.
El dirigente del grupo Galileo, el diputado Guadalupe Acosta Naranjo, comentó que el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México está firme en construir un bloque alternativo al de Morena, lo que él llama el Cuarto Polo, con PRD, PT, MC, movimientos independientes y alcaldes.
Las definiciones sobre la candidatura se deberán dar máximo tres meses después de que pasen las elecciones locales de junio.
Acosta afirmó que tanto Miguel Mancera como Silvano Aureoles, gobernador de Michoacán, están apresurando la construcción de un proyecto de izquierda.
Calificó de inexacto que Mancera declinará a favor de López Obrador, porque sigue buscando construir un acuerdo con el PRD.
Entre los arriba mencionados están los candidatos presidenciales de 2018 y de esa lista saldrá el próximo Presidente de México.
Los actores y sus partidos están en campaña.
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