Debido al Día Internacional de la Mujer vamos a escuchar sobre un tema en especial por encima de otros: La Teoría de Género. La Violencia contra la mujer. Algunas de sus expositoras la conocen muy bien, otras, sólo de nombre y muy, pero muy por encima.

 Las celebraciones por el citado día serán muy distintas y variadas en su “género”. Los medios de comunicación se han empezado a ocupar de ello y se habla de la celebración en general. Pues felicidades a todas las mujeres en su Día Internacional de la Mujer que seré como siempre, el 8 de marzo. (Luego siguen como otros cuatro en que se habla de lo mismo, pero con otro nombre).

El de marzo dista mucho de ser algo como el “Día de la Madre”. Esto se confunde fácilmente y las feministas no hacen el menor esfuerzo por aclararlo. No les conviene. ¿Por qué? Por lo que el feminismo radical de género misógino de izquierda es.

¿Qué fomenta y qué es la Teoría de Género y el feminismo que la promueve?

La teoría de género insiste en convencernos que los seres humanos no tenemos sexo, sino género. ¿Será por eso que las actas de nacimiento de estado de Chihuahua han cambiado y ya no se leerá más padre y madre? No tengo la menor duda.

¿Y los diputados del PAN apá? “En Babilonia mijo”.

La teoría de género es presentada por grupos y organizaciones de mujeres, la mayoría de tendencias feministas muy radicales. Porque hay dos básicamente. Ellas-las radicales-culpan de todo a los hombres, las otras, sólo toman ciertas partes de la teoría para buscar equidad entre los géneros o sexos. Lo que quien escribe comparte con ellas, con las no radicales. Pero sólo eso.

Las mujeres más radicales, las feministas de género, aseguran que los hombres somos seres despreciables y de instintos bestiales, capaces de todo, de atacar a las indefensas mujeres que siempre son las víctimas y que se encuentran en gran desigualdad ante el hombre debido a una cultura patriarcal que en nada les favorece a ellas. Especialmente en el terreno político. Donde reclaman-como cualquier grupo-sus cuotas de poder.

Eso es lo que persiguen las lideresas feministas en todo el mundo, poder. Desde donde puedan formar una nueva sociedad. Donde las actas de nacimiento cambien y eliminen a los padres y a las madres.

Es preciso señalar que las mujeres que iniciaron la manifestación feminista allá a principios del siglo veinte, buscaban la igualdad y la terminación de los abusos a los que eran sometidas por el sistema capitalista norteamericano e inglés. Buscaban el derecho al voto, el que les era negado  muy injustamente. También lo era el trato que les daban, por lo que coincido con aquellas en su búsqueda.

El mal trato y la marginación las llevó a buscar esa emancipación, pero el pensamiento de aquellas contrasta en todo con el pensamiento de las actuales. Bástese por hoy comentar que las de antaño no apoyaban el aborto en ninguna de sus “presentaciones”, ni los cambios a la familia que hoy buscan las feministas del mundo. Donde han propuesto 31 diferentes identidades de género. ¡Sí, 31!

La teoría de género promueve no sólo cambios, sino una revolución. Janet Richards, conocida feminista declaró: “el feminismo es radical en su naturaleza…son de las instituciones sociales de las que nos quejamos primeramente…si consideramos el pasado, no hay duda de que toda la estructura de la sociedad, fue diseñada para mantener a la mujer enteramente en el poder sobre el hombre.” La anterior declaración fue publicada hace unas décadas en el “Feminist Mayority Newsletter,” una carta de noticias que circulaba entre las feministas.

La mayoría de los hombres, especialmente los políticos, no lo logran digerir, no toman en serio al movimiento feminista. ¿Por qué? Porque no lo entienden. Porque se sienten amenazados ante el embate de las feministas.

El mayor número de hombres, no saben qué hacer, no saben cómo tratar una teoría tan hostil y radical en su género y contra los hombres. Los que saben defenderse contra otro igual, pero no contra alguien que se parece a su madre y al que se le ha enseñado que la mujer es más débil. Pero porque es cierto en lo físico. Hombres y mujeres sólo somos diferentes en lo físico, pero somos iguales en muchas otras áreas. Somos iguales, pero diferentes.

Sexo y género no son lo mismo.

Lo hemos aceptado por la presión de las “débiles minorías feministas”.

La identidad del ser humano-lo sabemos-tiene que ver con qué se es; hombre o mujer, masculino o femenino, niño o niña. Nuestro sexo es determinado por la forma de nuestro cuerpo y por sus órganos, por nuestras hormonas y el centro cerebral que las controla. Así, nuestra identidad es física por naturaleza, enraizada en nuestra biología. Ellas lo niegan y dicen que podemos escoger lo que queremos ser.

De ahí que el expresidente Obama, legisló para que personas con genitales de hombre, con pene, pudiera entrar a un baño de mujeres, con genitales femeninos, con vagina.

¿Qué dice la teoría?

"El género es la construcción social que se impone a un cuerpo sexuado, no nacemos ni mujeres ni hombres; la sociedad nos convierte en mujeres y hombres, nos forma una identidad de acuerdo con lo que cada cultura espera para los hombres y las mujeres".

Lo que en buen español quiere decir que yo soy hombre porque me educaron para ser hombre, no porque que tengo pene. No obstante yo soy hombre porque nací hombre y mi madre fue mujer, porque nació con órganos característicos de las mujeres. Pero la cosa no para ahí, La teoría de género va hasta el meollo del asunto en las relaciones entre hombres y mujeres. ¿Qué quiere? ¿Qué busca?

La teoría de Género busca alterar las estructuras institucionales y sociales que a la óptica feminista causan la inequidad de la que hablan y una de esas instituciones es la familia.

Uno de sus mayores esfuerzos se centra en que se cambie el uso de la palabra familia, por: “familias,” ¿Para qué? para incluir, “con todas las de la ley”, a las parejas del mismo sexo, léase género.

Particularmente no tengo nada en contra de las parejas homosexuales, cada quien puede decidir lo que quiera hacer con su vida y después afrontar las consecuencias de esas decisiones. Sean parejas homosexuales, de lesbianas o heterosexuales.

Pero volviendo al tema, en la teoría feminista de equidad y género, la maternidad es vista como un estorbo que impide la realización de la mujer.

Abiertamente apoyan el aborto, pero como un profiláctico sexual. Piden que a las adolescentes les sean otorgados “servicios de anticoncepción confidenciales”, siendo el aborto uno de ellos. Entre esas organizaciones se encuentran las mujeres católicas por la libertad de decidir. Organización no avalada por la iglesia Católica. ¿Y qué opina esa iglesia?

En una declaración del Arzobispado Católico Mexicano señalan que: “La ideología de género que enseñan los libros de quinto y sexto grado de primaria, promueve las prácticas homosexuales…el Cardenal, Norberto Rivera Carrera, señala que: “las publicaciones del DIF y la Secretaría de Salud, como la de Educación Pública, intentan evitar la existencia de los sexos femenino y masculino e invitan a las desviaciones sexuales como la homosexualidad, la bisexualidad, la transexualidad y otras aberraciones. La ideología de género es un argumento feminista de que los roles sociales y el sexo se construyan individualmente y el género es producto de la cultura y no de la naturaleza…los que son roles socialmente construidos.” (SIC)

Ahora amigo amiga que me lee, saque usted sus propias conclusiones.

La perspectiva del género debe ser tomada en serio porque ataca no sólo al hombre, a la mujer y también a la familia como institución. Es hostil a la religión tradicional, demanda cuotas en cada campo para la mujer-así, en singular-y comunica datos seriamente tergiversados. Infringe serios daños en personas y en las instituciones. En pocas palabras en un intento por rehacer al ser humano y crear un mundo que no puede existir. Y las actas de nacimiento del Estado de Chihuahua hoy, son una prueba más al respecto. Y ese es, El Meollo del Asunto.

Tuiter; @elmeoyodlasunto

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Web: www.danielvallesperiodista.

Imagen de: Porque-se.com