Tras el sismo de magnitud 6.4 que sacudió a la turística isla de Lombok, situada en Indonesia, en donde hasta el momento 98 personas han muerto y decenas de personas han resultado heridas, el papa Francisco envió su pésame a través de un telegrama.
El Santo Padre lamentó la pérdida de vidas y la destrucción de propiedades causadas por el terremoto, al mismo tiempo el papa Francisco seguro que brindara sus oraciones por el eterno descanso de los fallecidos, la recuperación de los heridos y el consuelo de todos los que perdieron un ser querido durante el desastre natural.
Asimismo pidió a los equipos de rescate y a las instituciones involucradas continuar con los esfuerzos para asistir a víctimas del terremoto.