Ante la crisis de desabasto de medicamentos e insumos en las instituciones públicas de salud, el Grupo Parlamentario del PAN presentó una iniciativa ante la Comisión Permanente que reforma la Ley General de Salud, la Ley del Seguro Social y la Ley del ISSSTE a fin de establecer el reembolso a pacientes por la compra de medicamentos.
“El Estado tiene la obligación de garantizar el abasto de medicamentos en el sistema público de salud. Cuando no pueda hacerlo, debe reembolsar a las personas por su compra. La salud y la vida no pueden depender de las farmacias vacías. El derecho a la protección de la salud exige mecanismos como el reembolso, para evitar vulneraciones y proteger la economía familiar”.
Así lo expresó en voz de Acción Nacional, el senador Francisco Ramírez Acuña, quien aseguró que esta propuesta busca atender el desabasto y garantizar que ninguna persona se quede sin tratamiento médico, toda vez que se ha generado ya una situación crítica que tiene como principal riesgo la salud y la vida de las personas enfermas, “problemas que no han podido ser resueltos ni por la anterior administración, ni por la actual”
Señaló que todos los experimentos del gobierno federal, tanto anteriores como actuales, para resolver el desabasto de medicamentos han fracasado, como la centralización de las compras por la Oficialía Mayor de Hacienda sin experiencia en adquisiciones.
El haber recurrido a UNOPS, que sólo concretó parte de las compras, la creación de la Megafarmacia del Bienestar que implicó un gasto millonario sin surtir medicamentos, y la asignación a Birmex de la gestión de licitaciones, provocando sobreprecios y actos de corrupción.
El senador por Jalisco cuestionó que nuevamente en días pasados, el gobierno federal volvió a anunciar con bombo y platillo que ahora sí, a partir de agosto, se resolvería el problema del desabasto, con la novedad de que se arrendarán camionetas “camionetitas o camionetotas para distribuir los medicamentos adquiridos a las unidades médicas en las entidades federativas”.
Consideró que es muy difícil creerle al gobierno federal, pues la Secretaría de Salud gastó 4 mil 203 millones de pesos entre enero y mayo del 2025, respecto a igual periodo del 24, mostrando que la salud no es una prioridad.
Asimismo, dijo que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares, del INEGI, el gasto de bolsillo en medicamentos ha aumentado significativamente, agravando la carga económica de las familias.
Y contrario a lo predicado por el oficialismo, en lugar de fortalecer y mejorar la salud pública en beneficio de las personas, lo que ha proliferado son las farmacias privadas con sus consultorios adyacentes.
Por ello, invitó a senadores y diputados a respaldar esta iniciativa para que la compra de medicamentos de los tratamientos que requieren las personas no afecte la situación económica de las y los mexicanos.
Redacción