En la primera sesión pública de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), la magistrada presidenta Mónica Aralí Soto Fregoso aseguró que el proceso electoral de 2024 está plenamente garantizado y México puede estar tranquilo porque cuenta con un órgano jurisdiccional fortalecido que trabaja en armonía y con unidad, además de actuar con apego irrestricto a los principios de certeza, legalidad, independencia, imparcialidad, objetividad, transparencia y profesionalismo.

Sostuvo que el Tribunal Electoral inicia este año con pasos firmes en la tarea de proteger los derechos fundamentales de todas las ciudadanas y los ciudadanos de México, y para ello destacó el respeto a la igualdad del trato, sin separaciones ni discordias, lo que permitirá honrar la fortaleza de esta institución. No es un borrón y cuenta nueva, por lo que consideró que debemos sentirnos orgullosos de los que se ha construido en los últimos 28 años y estar comprometidos con preservar la independencia y la autonomía de este órgano, valores que se seguirán defendiendo a plenitud.

“La sociedad mexicana, a ella, a los partidos políticos, a las agrupaciones, a las asociaciones, a la academia, a los expertos, a todas y todos quienes participan en este proceso electoral, les manifiesto que va en prenda mi imparcialidad, independencia y autonomía en mis decisiones, honrando toda la esencia de este órgano de justicia electoral. El proceso electoral está plenamente garantizado, ahí en los trabajos se concentrará nuestro quehacer cotidiano. El TEPJF solamente se debe a las mexicanas y a los mexicanos”, afirmó.

En el mensaje inaugural de su presidencia, aseguró que el proceso electoral, el más grande, complejo y paritario de la historia de México, está garantizado. “Hoy, nuestra institución llega a este proceso electoral con el prestigio y la confianza que han sido edificados en casi tres décadas, gracias al esfuerzo de quienes la han integrado”.

Hizo un amplio reconocimiento a las trayectorias de la magistrada Janine Otálora Malassis y de los magistrados Reyes Rodríguez Mondragón, Felipe de la Mata Pizaña y Felipe Alfredo Fuentes Barrera, así como al talento jurídico de quienes integran las cinco salas regionales y la Sala Especializada.

De igual forma, expresó su respeto hacia las ministras y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a la ministra presidenta, Norma Lucía Piña Hernández, a quien reiteró su firme convicción de seguir fortaleciendo los vínculos institucionales del Poder Judicial.

Saludó la presencia de la consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral, Guadalupe Taddei Zavala, y de consejeras y consejeros electorales asistentes, así como de la obmudsperson de la Comisión de los Derechos Humanos de la Ciudad de México, Nashieli Ramírez Hernández; de la representación de la Asociación de Magistradas y Magistrados de Las Américas; de los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLES) y sus integrantes, además de las redes de mujeres como 50+1, Mujeres en Plural, la Red de Defensoras de los Derechos Político-Electorales de las Mujeres, entre otras.

Ante ellos, la magistrada presidenta del TEPJF resaltó que “México puede estar tranquilo. Cuenta con un Tribunal con autonomía e independencia”, el cual desde noviembre de 1996 ha resuelto 264 mil 114 medios de impugnación, emitido mil 810 jurisprudencias y tesis relevantes, de las cuales mil 351 están vigentes.

Dijo que el Tribunal Electoral es mucho más que las cinco magistraturas que integran la Sala Superior, “es un equipo de mexicanas y mexicanos preparados, comprometidos totalmente con el proyecto democrático del país. Uno de los compromisos que asumo al interior de este Tribunal, primero, es no cesar en mi esfuerzo cotidiano para construir armonía y unidad interna; y la aplicación de una política transversal con perspectiva de género. Esta presidencia no tolerará acto alguno de acoso o violencia que lesione la integridad física o psicológica de las mujeres y de todo el personal que labora en esta institución”.

Indicó que ampliará la protección y garantía de los derechos político-electorales para quienes no tienen la posibilidad de solventar una defensa particular, mediante el fortalecimiento de la Defensoría Pública Electoral, añadiéndole la perspectiva de género. Adelantó que se optimizará el uso de las tecnologías de la información para mejorar el acceso a la justicia ciudadana y dotar de certeza a las actoras y los actores políticos.

“Garantizaremos —también— que los recursos públicos sean aplicados con una eficacia y eficiencia, con toda la transparencia y mediante el establecimiento de mecanismos que permitan a la sociedad civil participar de los procesos administrativos, con la finalidad de que ejerzan una labor de vigilancia, como una contraloría social”, apuntó.

La magistrada presidenta Mónica Aralí Soto reconoció durante su mensaje la lucha de las mujeres por la igualdad de los derechos políticos: “¡A ellas me debo!” y mencionó que México empieza a saldar su deuda histórica con las mujeres.

Con motivo de la primera sesión pública de la Sala Superior de 2024, la magistrada presidenta, Mónica Aralí Soto, encabezó por la mañana la ceremonia de honores a la Bandera en la explanada principal. En el acto cívico participaron los magistrados de la Sala Superior, Felipe de la Mata Pizaña y Felipe Alfredo Fuentes Barrera, además de magistradas y magistrados de las cinco Salas Regionales y de la Sala Especializada del TEPJF, así como ex magistradas y magistrados. Asimismo, asistieron consejeros de la Judicatura Federal, magistradas y magistrados de diversos tribunales electorales locales del país, titulares de los OPLES, representantes de colectivos de mujeres, así como personal del Tribunal Electoral.

Redacción