La directora del Sistema Nacional DIF, María del Rocío García Pérez, obliga a sus trabajadores a donarle del 2 al 4 por ciento de su salario, y esto viene ocurriendo de esta manera desde 2019; hecho que se denunció ante la Secretaría de la Función Pública (SFP) hace nueve meses.
La SFP abrió un expediente apenas el pasado 23 de abril, tras recibir denuncias, que reveló Animal Político, en las que se explica la manera en la García Pérez y dos más de sus colaboradores hacían este movimiento.
En ese sentido, los denunciantes dijeron que la directora utiliza como estrategia de amedrentamiento la supuesta amistad que mantiene con el presidente Andrés Manuel López Obrador y su esposa Beatriz Gutiérrez Müller desde hace más de dos décadas.
Explicaron que Rocío García distribuyó entre altos mandos del DIF un listado con las siete categorías de plazas escogidas y los respectivos montos a entregar; que van de los 500 a los 2 mil 500 pesos mensuales.
De ser así, y correspondiendo a nómina de la institución, las categorías enlistadas suman 1,002 puestos de trabajo; por lo tanto, las entregas ascenderían a 658 mil 400 pesos al mes, es decir, 7 millones 900 mil pesos al año.
Por otra parte, a través de las denuncias y testimonio se confirma que los funcionarios, cuyos sueldos oscilan entre los 12 mil y los 100 mil pesos; debían entregar el dinero en efectivo para el supuesto “Programa Ahijado”, del que no existe registro oficial en la estructura del DIF.
El argumento ha sido, que el dinero serviría para los gastos de la institución que no alcanzan a solventar con el presupuesto público. Sin embargo, los empleados desconocen en qué se han utilizado dichos recursos y tampoco existe ningún informe que demuestre en que se ha gastado dicho dinero.