Omar Muñoz, presidente municipal electo de Cuautlancingo, ha asegurado que será promotor de que la iniciativa privada se involucre en tareas comunes en su gestión y contribuya al desarrollo del municipio, un ejemplo de las izquierdas modernas, que no están peleadas para nada con los empresarios.
La apuesta de Muñoz va en dos caminos, la primera en la apertura de nuevos comercios y también la de una mayor derrama económica para el municipio, que ya al día de hoy contribuye en buena medida a la economía del estado.
Recordemos que Cuautlancingo alberga el 17 % de la inversión extranjera directa a nivel estatal, respaldado por la fuerza de la industria automotriz de Puebla.
Son buenas noticias que Muñoz, electo al representar a la izquierda, que en muchas ocasiones se ha señalado por estar peleado con la iniciativa privada, ponga el ejemplo de que se puede impulsar una política social de la mano de los capitales.
La privatización, los proyectos compartidos entre estos dos sectores y la participación de las empresas no son malas para ninguna administración, lo son las pésimas gestiones y la corrupción que hay detrás, y en México desafortunadamente abundan casos como estos.
Omar Muñoz impulsa a la izquierda moderna, la que exige participación ciudadana, de las empresas, las organizaciones y ante todo planeación para construir mejores gobiernos.
