Luego de que el dos veces fallido candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador presentara su registro como pre-candidato en su propio partido (movimiento de regeneración nacional) morena, las promesas de pre campaña comenzaron a llegar en voz del tabasqueño.

Frente a los integrantes de la comisión de elecciones de morena, el ex perredista emitió sus propuestas para la reconstrucción del país, destacando la POLÉMICA descentralización de las dependencias federales a los estados, además de insistir que acabará con la corrupción empezando de arriba para bajo, es decir, aumentará los sueldos a todos los de abajo (maestros, enfermeras, policías, médicos, soldados y otros servidores públicos).

De igual forma, el ex jefe de gobierno capitalino enfatizó que de ganar las elecciones, su gobierno producirá sus propios fertilizantes y los distribuirá entre los agricultores que así lo necesiten, según, para impulsar el campo mexicano.

Entre varias propuestas que muchos de sus opositores le han cuestionado, surgió una que peculiarmente llamó la atención de sus críticos, y es que en el punto 7 de su discurso, el dueño de morena señaló que desde el primer día de su eventual gobierno, contratará a 2 millones 300 mil jóvenes, a los que se les conoce como “ninis” (ni estudian, ni trabajan) y se les otorgará un sueldo como aprendices de 3 mil 600 pesos mensuales.

AMLO, puntualizó que esos jóvenes recibirán capacitación para el trabajo en talleres, empresas, comercios y en otras actividades productivas del campo y de la ciudad, argumentando que el Estado no se olvidará de los jóvenes nunca más. Becarios sí, sicarios no, dijo López Obrador.

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Redacción
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