Columna El Meollo del Asunto.

Por: Daniel Valles.

En política todo pasa y nada sucede. Solo cuando pasa, sucede. En política lo más seguro es que no hay nada seguro. En la política se tienen amigos de mentiras y enemigos de verdad.

Estos y otros axiomas se dicen y se saben. Al menos en quienes ya tienen muchos años como para haberlos confirmado. Entonces, su actualidad y función está más que comprobada.

Un axioma más sería que en política sí se unen el agua y el aceite. El PAN se ha coaligado con el PRD algunas veces para algunas elecciones. Unas ocasiones en coaliciones firmadas ante el IFE, entonces, otras veces de palabra y algunas más “tras bambalinas”.

Hoy se ha dado otra. El partido de MORENA, formado en su mayoría por gente que se autodenomina de izquierda, se une al partido Encuentro Social. Conocido mayormente como PES. Con ellos también el Partido del Trabajo. Partido de izquierda.

La coalición no sería como para llamar la atención, a no ser porque se sabe que MORENA  y el PT se forman con personas a las que Andrés López Obrador denomina como “libres pensadores”.

Se sabe también que Encuentro Social es un partido formado por personas que profesan la fe cristiana. Es decir, son cristianos evangélicos. (Algo que en el PES se empeñan en difuminar).

Entonces se coaliga o se une el agua con el aceite. Algo que solo en política y en tiempo de elecciones sucede con los partidos políticos. Cuando anteponen sus  intereses partidistas de manera maquiavélica. Porque en la realidad, no pasa así. Es imposible. Ahí El Meollo del Asunto.

Opinión de Daniel Valles
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