Pésima jugada intentó hacer este domingo el actual consejero nacional del Partido Verde Arturo Escobar, al respaldar el incremento en la percepción de inseguridad en la capital poblana, los baches, la imposición de parquímetros y demás mañas de la actual administración que encabeza el ex priista y ahora morenista José Chedraui Budib ‘Pepe’.
Y es que saltándose a la dirigente nacional del partido Karen Castrejón, así como a los dueños del Verde Ecologista como son Manuel Velasco y Jorge Emilio González Martínez, Arturo Escobar dejó ver muy rápidamente sus limitaciones políticas en tiempos de la 4T.
Vea usted amable lector.
Este domingo, Arturo Escobar demostró ser un pésimo operador político, pues de tener dos dedos de frente no se habría sentado con un alcalde que hizo lo impensable en Puebla, ubicar a la ciudad de Puebla con una percepción de inseguridad en 84%.
¿Nadie le dijo al ex dirigente del Verde que el actual alcalde prácticamente está reprobado en todas las encuestas serias de opinión?
¿Nadie le pasó una tarjeta donde le recordaran que el alcalde no ha cumplido su promesa de relaminar toda la ciudad?
¿No le explicaron a Arturo Escobar que el actual alcalde justificó imponer parquímetros a los poblanos a cambio de empeorar su calidad de vida en las calles y empeorar la inseguridad?
¿Sabe Arturo Escobar que lo mejor que le puede pasar a la oposición es que Pepe Chedraui busque la reelección en el 2027? De hacerlo, prácticamente la oposición recuperaría el gobierno de la ciudad y no tanto por los propios partidos que representan a la disminuida oposición, sino porque el hartazgo ciudadano contra el “imparable” es real y se palpa en las calles de la ciudad.
Lamentablemente nadie le pasó estos pequeñitos detalles.
Pero más allá de las evidentes limitaciones de Arturo Escobar quien estuvo a nada de ser detenido en 2015 por delitos electorales, llama la atención las atribuciones que se tomó a nombre de Manuel Velasco, Jorge Emilio González y de la propía dirigente nacional del partido Karen Castrejón para tomarse fotografías en los portales frente al zócalo de la capital con todo el objetivo de ser vistos por la prensa y el círculo rojo político para ‘respaldar’ al edil reprobado por la mayoría de los poblanos.
La fotografía de estos grises personajes también revela algo más fuerte aún: Pepe necesita al Verde y el verde no necesita a Pepe.
Surge otra hipótesis más en esta temprana sucesión 2027 que ya inició para el Ayuntamiento de Puebla: ¿Habrá venido a firmar un negocio?
Ya estaremos investigando sobre esto, porque sólo con negocios es como se explicaría el presunto respaldo al “imparable” a todavía más de 2 años de la siguiente elección.
¿O no?