Este martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador, encabezó su primer evento después de recuperarse de COVID-19, sin embargo, mantuvo su postura de no respetar la sana distancia o usar cubrebocas.
Eso durante el 108 aniversario de la Marcha de la Lealtad en el Castillo de Chapultepec, en el que no se respetó el protocolo de sana distancia durante todo el recorrido, manteniéndose a menos de un metro de distancia de sus acompañantes.
Durante el evento, el Jefe de Estado asistió en compañía de su esposa Beatriz Gutiérrez Müller; el Secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval; el Secretario de Marina, José Rafael Ojeda; y el vocero de Presidencia, Jesús Ramírez Cuevas; ninguno portando cubrebocas.
Por otro lado, se observó a mandatarios como Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México y Olga Sánchez Cordero, Secretaria de Gobernación, acatando las medidas sanitarias y utilizando mascarilla.
Además, militares que encabezaron el evento y marcharon en conjunto con el presidente, si portaron el cubrebocas.