Luego de que los seis integrantes del Consejo Consultivo de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) renunciaran a su puesto señalando obstáculos a su trabajo, así como “amenazas y calumnias”, la entidad respondió que las personas que ocupaban esos cargos “desinforman y mienten” y los acusó de ejercer una “labor obstruccionista”.
A través de un comunicado, el organismo dijo que esto es grave y una muestra más de la agenda política y personal de quienes integraban este Consejo, para impulsar una campaña de desprestigio en contra del mismo.
Fue así que la CNDH desestimó las acusaciones de los ex consejeros Tania Espinosa, Adalberto Méndez, Bernardo Romero, Jorge Alejandro Saavedra, Ángel Trinidad y Georgina Diédhiou advirtiendo que “no somos rehenes de ninguna agenda, porque nuestro único compromiso es con las víctimas, con todo el pueblo de México”.
Para concluir, se consideró que esta renuncia “no coloca a la CNDH ante ninguna crisis” ya que llega justo “en el momento en el que la Comisión produce más resultados para el pueblo, cuando se emite el mayor número de recomendaciones de toda su historia y, sobre todo, cuando estamos desenmascarando la simulación y confabulaciones que antes imperaban en esta institución”.
Redacción