El ex gobernador de Guerrero Ángel Aguirre negó a los diputados federales de la comisión Especial para dar seguimiento al caso Iguala que en los hechos del 26 y el 27 de septiembre de 2014 hayan participado el Ejército o la policía estatal.

Además sostuvo que en siete meses que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) —que envió la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)— ha investigado el caso, no lo ha buscado ni tampoco al ex fiscal general del estado, Iñaki Blanco, a pesar de que ellos fueron las autoridades responsables de la indagación en las primeras semanas.

Aguirre, junto con el ex fiscal de la entidad y ex funcionarios estatales se reunieron ayer a puerta cerrada por cuatro horas con los diputados federales de dicha comisión, para atender sus cuestionamientos sobre el caso.

Por petición del ex mandatario guerrerense, emanado del PRD, la reunión no fue grabada ni hubo acceso a los medios.

Al concluir el encuentro, la presidenta de dicha comisión, la panista Guadalupe Murguía, detalló que Aguirre manifestó: “no hubo participación de los militares y su intervención fue posterior a los hechos”.

La diputada adelantó que como parte de las reuniones de esta comisión buscarán reunirse con José Luis Abarca en el penal de El Altiplano, aunque aún no hay fecha ni han hecho la solicitud correspondiente.

De acuerdo con fuentes que estuvieron presentes en la reunión, diputados de izquierda reprocharon a los exfuncionarios que el informe del GIEI les cuestiona su responsabilidad en los hechos.

Al respecto, el exfiscal subrayó que dicho informe no tomó en cuenta su declaración, ya que nunca ha sido consultado o cuestionado por los expertos para aportar a la investigación.

Ángel Aguirre secundó esta afirmación y también aseguró que no ha sido buscado por el GIEI.

A su llegada a la reunión, Aguirre dijo en entrevista tener la conciencia tranquila y que la relación con el ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, y su esposa, siempre fue institucional.

“Cuando se tiene la conciencia tranquila no veo razón para tener temor, más bien tengo preocupación, tengo rabia de lo que sucedió en Iguala con respecto a los jóvenes y evidentemente mi contribución siempre estará orientada para que se conozca la verdad”, apuntó el exgobernador de Guerrero.

Con información de: La Razón
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