Este suero será distinto al célebre ZMapp, desarrollado por Estados Unidos y Canadá con la participación de grupos privados, y que se cree sirvió para el restablecimiento de la enfermera española Teresa Romero durante las horas críticas internada en un hospital en Madrid.
Muy escaso en todo el mundo, pues se tarda varios meses en ser desarrollarlo, el suero ZMapp tiene una función distinta a una vacuna:
El primero es un complemento para aumentar las defensas inmunológicas frente al virus, mientras que la vacuna sirve para estimular a que el cuerpo cree por sí mismo las defensas.
El Instituto Butantan reveló que, contrariamente al ZMapp, su suero estará elaborado en base al virus de la rabia, pues al parecer su estructura tiene coincidencias con la proteína del ébola.