El baloncesto de Grecia inició el jueves alrededor de conmición por la agresión del exjugador Manolis Papamakarios -que formó parte de dos clubes de la ACB- a su expareja, Manto Tzavaras.
Papamakarios, se retiró de la actividad en 2018 después de pasar por Lagun Aro Gipuzkoa, Montakit Fuenlabrada, Olympiacos, Peristeri, Faros y Makedonikos, actualmente es entrenador ayudante y responsable de la cantera del Ifestos Limnou.
El griego presidía la asociación de jugadores de su país hasta este martes, día en el que dimitió cuando el escándalo se hizo más grande.
Con el futuro del Olympiacos aún en vilo, esta nueva polémica sacude el deporte heleno luego de de que Tzavaras denunciara la paliza en sus redes sociales, al publicar unas fotos que muestran el resultado de los golpes realizados a ella presuntamente por el exdeportista.
La ex pareja denuncia una larga lista de agresiones de Manolis, ya que no sería la primera vez que Papamakarios utiliza la violencia contra ella. Tzavaras le acusa de golpearle varias veces el año pasado hasta el punto de haberle amenazado con un cuchillo.