Con un total de 97 denuncias realizadas en contra de “superdelegados” del Gobierno Federal, la Secretaría de la Función Pública (SFP) sigue sin presentar sus respectivas sanciones.
De acuerdo a El Universal, 86 de estas denuncias continúan en trámite y 11 más fueron desechadas debido a la falta de elementos que fincaran responsabilidades.
Los señalamientos giran en torno a que al menos en 20 expedientes se acusa a estos “superdelegados” de pedir dinero para acudir a eventos, y del uso de recursos públicos para fines distintos a los establecidos en sus protocolos.
Aunado a ello, se suman faltas administrativas en el manejo de programas sociales y cuatro denuncias por intervención en procesos electorales, menciona el diario.