Si bien los últimos 15 meses han sido complicados por la situación sanitaria, la BUAP logró continuar con su vida académica. “Hemos respondido a los retos de la pandemia, hemos aprendido muchas cosas, hemos valorado muchas más y todo ello nos fortalece como comunidad, gracias a que en todo momento nos mantuvimos unidos en un claro objetivo: el compromiso institucional de brindar una educación integral y de calidad a las y los jóvenes”, afirmó el Rector Alfonso Esparza Ortiz.
Tras escuchar el III Informe de Labores de Hilda Ocaña Meléndez, directora de la Preparatoria “Lic. Benito Juárez García”, el Rector Esparza señaló que el personal docente mostró disposición para recibir capacitación para impartir clases a distancia y acompañar a los estudiantes en este aprendizaje virtual.
“Esta crisis sanitaria nos ha golpeado, pero también ha evidenciado la profunda vocación de las y los maestros, quienes duplicaron el tiempo de atención a los estudiantes, dando clases, asesoría, tutorías y revisando sus actividades a través de diversos medios, desde correos electrónicos, hasta chats y mensajes”.
Esparza Ortiz notificó que 615 jóvenes de esa preparatoria concluyeron sus estudios, quienes recibieron sus certificados y gracias al trabajo de docentes y tutores disminuyó la deserción escolar que se visualizó durante los momentos más difíciles de la pandemia. Además, hubo estudiantes que alcanzaron un destacado desempeño en diversas olimpiadas estatales y nacionales.
Como resultado del programa “Rechazo Cero” a los aspirantes del nivel medio superior, “esta escuela recibió a mil 344 estudiantes, cifra que duplicó la matrícula habitual, por lo que fue necesario formar 42 grupos académicos de nuevo ingreso, lo que también supuso un esfuerzo adicional para el personal docente y administrativo”, refirió.
Informó que la administración central no suspendió la mejora de la infraestructura educativa; en el caso de esta preparatoria incluyeron el traslado de los laboratorios de informática, autoacceso y lengua extranjera al edificio de laboratorios. Así se rescataron espacios subutilizados y se crearon nuevas áreas para asesorías y tutorías individuales y de grupos pequeños en el edificio BJ2, además de un sitio para impartir talleres en el edificio BJ6. Se instaló sistema de voz y datos en la cancha techada y se colocó nomenclatura en todos los edificios.
Finalmente, el Rector Alfonso Esparza comunicó que el proyecto de lombricompostaje, realizado en esta escuela desde hace casi una década, se suspendió para no exponer a la comunidad al contagio de COVID y las camas en las que se procesa abono orgánico se trasladaron al Eco Campus Valsequillo.
Al presentar su informe, Hilda Ocaña Meléndez indicó que 14 academias realizaron actividades en modalidad virtual, para atender a una matrícula de más de 2 mil 600 alumnos. Esta y otras acciones permitieron alcanzar una eficiencia terminal de 96.8 por ciento, para la generación 2017-2020.
Igualmente mencionó las diversas becas otorgadas a más de 2 mil 600 estudiantes, entre estas las institucionales, Universal Benito Juárez, de empresas, así como de apoyo tecnológico y de conectividad. También dio a conocer las gestiones realizadas para mejorar la infraestructura educativa.
Ocaña Meléndez reconoció el trabajo de estudiantes en certámenes de Filosofía, Matemáticas y Química, quienes se posicionaron en los primeros lugares del medallero: primer y tercer lugar en la IX Olimpiada Mexicana de Filosofía; medalla de bronce en la XXX Olimpiada Nacional de Química y segundo lugar en Olimpiada Estatal de Matemáticas.