Investigadores de la Facultad de Administración de la BUAP elaboraron un empanizador a base de amaranto y chía, lo que brinda la capacidad de absorber una menor cantidad de grasa en comparación con el pan molido comercial, además de que tiene grandes cantidades de proteína, vitaminas y minerales, así como fibra benéfica para el funcionamiento gastrointestinal.
Norma Angélica Santiesteban-López, profesora investigadora de esta unidad académica, dio a conocer que el objetivo es que además de un buen sabor, las carnes, como pollo, res o cerdo, cuenten con elementos nutricionales proporcionados por otro tipo de alimentos.
En este sentido, informó que el amaranto es un nutriente esencial para un sano crecimiento ya que contiene vitamina B1 (tiamina), que juega un papel importante en el metabolismo de carbohidratos, grasas, proteínas y ácidos nucleicos, entre otros.
La chía, a su vez, se utiliza para disminuir los niveles de obesidad y mantener los controles de peso, cuenta con grandes cantidades de fibra, sustancias antioxidantes naturales como los flavonoides, es rica en ácido graso omega 3 y provee vitaminas del grupo B, así como hierro y calcio.
A diferencia de un pan molido comercial, con este empanizador no se utiliza huevo, lo cual contribuye a no elevar los niveles de colesterol en personas que sufren de enfermedades cardiovasculares; en su lugar se usa agua de garbanzo que contiene una gran cantidad de almidón que hace que se pegue a la carne. Así también contiene proteínas y vitaminas.
La doctora en Ciencias en Alimentos subrayó que otra característica es que el empanizador no necesita freírse en aceite, puede ser horneado junto con la proteína animal, hecho que reduce la cantidad de grasa entre 35 y 40 por ciento.
Sin embargo, aseguró que si aun así se desea freír, la cantidad de grasa sigue siendo de hasta 20 por ciento menos que con el pan molido.
Los resultados de las pruebas realizadas para comparar los niveles de grasa entre el producto comercial y el elaborado por los expertos fueron publicados en la Revista Iberoamericana de las Ciencias Biológicas y Agropecuarias, en el artículo Breading Process Using Legumes: Chickpea (Cicer arietinum), Pea (Pisum sativum) and Fava Bean (Vicia faba).
Dio a conocer que se realizó un registro de solicitud de patente del empanizador a base de chía y amaranto, para que pueda ser adquirido en tiendas de conveniencia.
Aparte de este producto, en la Facultad de Administración también se crearon unas botanas saludables de diferentes granos y semillas como frijol de soya, churritos de amaranto, palomitas de sorgo, rosquetas de arroz inflado, gelatinas a base de fibra de zanahoria y betabel, y gomitas bajas en grasa adicionadas con probióticos. Aparte de la chía y el amaranto, la doctora Santiesteban-López trabaja en la elaboración de otros empanizadores a base de pistache y almendra.
Dichos comestibles son el resultado de un trabajo de investigación realizado para contribuir a una mejor nutrición de la población, ya que gran parte de la alimentación actual se basa en embutidos, enlatados y grandes cantidades de grasa, hecho que ha contribuido a incrementar los niveles de obesidad y sobrepeso entre la población, además de que se padezca otro tipo de problemas como depresión.
“La clave para tener una nutrición equilibrada no es que te prohibas comer lo que quieres, sino cambiar tus hábitos alimentarios”, puntualizó Santiesteban- López.
Con información de: BUAP