El abuso de alimentos industriales “ultraprocesados” aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y de muerte, según dos estudios europeos realizados entre más de 120.000 personas y publicados este jueves.
Estos nuevos estudios, aunque no demuestran una relación directa causa y efecto, refuerzan los argumentos de trabajos anteriores que relacionaban los platos altamente procesados con un mayor riesgo de obesidad, hipertensión e incluso cáncer.
Los alimentos se consideran ultraprocesados cuando han sido sometidos a procesos de elaboración industrial (aceite hidrogenado, almidón modificado, etc.) y contienen muchos ingredientes, incluidos aditivos, reseñó nota del sitio web Noticias 24.
Un plato preparado, sin aditivos, congelado o no, no forma parte de este grupo. Pero la mayoría de los platos listos para calentar, las sodas azucaradas o con edulcorantes, los “filetes” vegetarianos reconstituidos con aditivos, las salchichas, las sopas deshidratadas y los aperitivos en general están entre ellos.
Generalmente son más ricos en sal, grasas saturadas y azúcar, y pobres en vitaminas y fibras, según los investigadores. A ello hay que añadirles los elementos contaminantes procedentes de los envoltorios y los contenedores plásticos.
Este tipo de alimentos representa más de la mitad de los aportes energéticos en numerosos países occidentales, según el INSERM francés (Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Médica).
El estudio español, evalúa las posibles asociaciones entre la ingesta de alimentos ultraprocesados y el riesgo de fallecimiento, sea cual sea la causa. Se elaboró a partir de 19.899 licenciados universitarios españoles (entre ellos 12.113 mujeres) de una edad media de 38 años.
Según este estudio, el mayor consumo de alimentos ultraprocesados (más de 4 porciones al día) se asocia con un riesgo de mortalidad, incluidas todas las causas, 62% superior en comparación con un menor consumo (menos de 2 porciones al día).