1. Dar contenido a la definición de ser el PRD un partido opositor al régimen político y al gobierno de Peña Nieto.
La crítica debe ser sistemática y argumentada. No ser comparsa. Si, ser propositivos, pero críticos.
Es evidente la conducta política de los principales "ganadores" de la "elección" interna de evitar cuestionar a Peña Nieto, a Osorio Chong, a Videgaray, entre otros principales funcionarios del régimen.

Debe revisarse la relación del partido con los grupos parlamentarios y gobiernos electos con las siglas del PRD a efecto de se observe y promueva nuestro programa.

El día de ayer, por ejemplo, el PAN ha cuestionado la postura de nuestros representantes en la cámara de diputados al negarse a convalidar una comisión investigadora sobre el evidente conflicto de interés, y posible cohecho, entre el consorcio Higa y el exgobernador del estado de México y hoy titular del ejecutivo federal. 

El PRD debe sumarse sin duda alguna a esta investigación de, quizá, el mayor hecho de corrupción de Peña Nieto.

2. Suscribir alianzas electorales sólo con partidos y fuerzas sociales progresistas, democráticas y de Izquierda.
Por tanto cancelar la equivocada orientación de alianzas electorales con el PAN. 

Seguir esa ruta nos convierte en los tontos útiles al partido de la derecha que voto con el PRI la reforma que hoy legaliza el saqueo de la mayor riqueza energética del país.

3. Evaluar y determinar en qué Estados de la República los gobernadores, u otros poderes fácticos,  mantienen el control local del partido y, en consecuencia, establecer un plan de acción que permita la recuperación de la independencia política del partido en todas las entidades y regiones del país.


4. Elaborar un Informe Abarca que contenga de forma clara los mecanismos que permitieron su candidatura y el cómo se desarrolló el gobierno local por él encabezado. Un documento necesario para ir al fondo hecho que ha cimbrado al país y al partido. Saber hasta donde y de quienes hubo responsabilidades en el ámbito partidista y actuar en consecuencia.

5. Fortalecer de manera genuina, acreditable, el carácter colectivo de los órganos directivos del partido. Algo diferente se inicia en el PRD. 
No dejemos que ese algo sea retroceder más de 25 años, esto es, el deshacer al partido esperanza de millones.
Debe hacerse a un lado la demagogia que se ha instalado en el partido en los últimos años.

6. Promover la creación de una Comisión Civil de la Verdad para  el caso Guerrero, que tenga acceso a los archivos y expedientes oficiales, para ubicar con absoluta claridad las responsabilidades de  autoridades municipales, estatales y federales en la tolerancia al crimen organizado en la  entidad y en particular sobre el tema de Ayotzinapa.

8.- Exigir el cese a la política de criminalización de la protesta social por parte de instancias gubernamentales.



En el PRD coincidimos desde el principio muchos que acudimos a un proyecto de una patria nueva, justa, de libertades, con igualdad de oportunidades para todas las clases sociales. Es la razón principal por el cual acudimos muchas y muchos a construir, al lado del Ing. Cuauhtémoc Cárdenas, el Partido de la Revolución Democrática.

Anunciamos que los días 5 y 6 de diciembre realizaremos nuestro Encuentro Nacional en la ciudad de Oaxaca donde concurrirán dirigentes de las entidades de la República; ahí evaluaremos la situación del partido y del país para decidir lo que en nuestra consideración sea útil para seguro impulsando las causas en favor de un México democrático, con desarrollo e incluyente.