El experto Rubén Santoyo Ayala dijo que el consumo elevado de cerveza y carnes rojas podría elevar de manera considerable el ácido úrico en la sangre y provocar complicaciones como dolor agudo y formación de tofos o bolas localizadas en distintas articulaciones.
El médico internista del Hospital de Especialidades del IMSS en Jalisco agregó que si en edades jóvenes, una persona aumenta su ingesta de alcohol primordialmente de cerveza, sus posibilidades de presentar hiperuricemia después de los 50 años aumenta.
“Sobre todo la cerveza, se sabe que la cebada -que es lo que contiene esta bebida- , al ser metabolizada se convierte en ácido úrico en el organismo”, puntualizó.
Añadió que la prevalencia es de cuatro varones por cada fémina, “la hiperuricemia no es hereditaria, por lo tanto no es necesario tener familiares que la presentaron anteriormente para que se pueda desarrollar en una persona”.
Aconsejó evitar el consumo de alcohol o moderarlo, al igual que el de carnes rojas, “que son ricas no sólo en proteína sino también en grasa, por lo que lo más idóneo es sustituirlas por carnes magras como el pollo, o por pescado, o consumirlas una vez por semana”.
Expresó que el exceso de ácido úrico en el organismo puede contribuir a mal funcionamiento del riñón y a la formación de piedras o cálculos renales, toda vez que esta sustancia se elimina del cuerpo en 70% mediante la orina y el resto al defecar.
Precisó que hasta 15 por ciento de pacientes con hiperuricemia desarrollaron cálculos renales.
Afirmó que la formación de piedras en el riñón en pacientes con hiperuricemia, también se asocia como efecto secundario a algunos tratamientos como la radioterapia y algunos medicamentos, sobre todo, diuréticos.
Subrayó que aproximadamente 20 por ciento de pacientes hipeuricémicos desarrollaran depósitos de sustancias conocidas como cristales, cuyo contenido es uratomonosódico, esta afectación es conocida como gota.
Manifestó que personas que padecen hipertensión arterial y que no están controladas son más propensas a desarrollar altos niveles de ácido úrico en la sangre.
“Los tofos o bolas producto de la elevación del ácido úrico suelen alojarse en codos, rodillas, muñecas y hasta 85% en dedos, siendo el llamado ‘dedo gordo’, donde comúnmente se presenta por primera vez la afectación”, concluyó.
Información: Notimex
Imagen: elrinconcervecero.com