Aunque la ciencia insiste en que el llanto es natural, la cultura sigue enviando mensajes que los hombres fuertes no lloran.
Muchos padres crían a sus hijos con la mentalidad de llorar en privado. En la cultura está “establecido” en muchos hombres que la identidad masculina debe de retener las lágrimas, excepto en momentos de tristeza extrema. Aunque las mujeres también han aceptado este punto de vista, más mujeres están expresando su creencia de que los hombres y los niños deben ser alentados a expresar emociones sensibles.
Lágrimas de Campeones, la historia del llanto.
Hasta hace poco, muchas culturas creían que las lágrimas eran un signo de hombría. La historia del mundo y la literatura están llenas de líderes hombres que lloraban públicamente. Las lágrimas hacían que un hombre mostrara emoción cuando las cosas iban mal. Guerreros medievales y samuráis japoneses colapsaron en momentos de tragedia épica. En la cultura occidental, la capacidad de un hombre para llorar indicaba su honestidad e integridad. Abraham Lincoln utilizó lágrimas estratégicas durante sus discursos, y los presidentes modernos han seguido su ejemplo. A pesar de todo esto, hasta hace poco, los hombres derramando lágrimas han sido vistos como algo que no es masculino.
Después de décadas de reprender a los hombres por sus lágrimas, la cultura parece estar volviendo a la idea de que el llanto es una fuerza masculina. Un estudio, realizado en Penn State, asegura que las lágrimas de un hombre son un signo de honestidad, mientras lágrimas de una mujer mostraron debilidad emocional.
Lágrimas y Salud
Se han encontrado muchos beneficios de llorar. Cuando la gente suprime las ganas de llorar, las emociones que se han expresado a través de las lágrimas se embotellan en su lugar. La bioquímica subyacente, afecta al cuerpo de manera diferente. Con el tiempo, las emociones reprimidas pueden desencadenar cambios fisiológicos que se manifiestan en síntomas clínicos tales como la presión arterial alta.
Los científicos sociales han encontrado correlaciones entre los hombres que lloran y su salud mental. Un estudio publicado en la revista Psychology of Men & Masculinity, encontró que los jugadores de fútbol que lloraban sobre los resultados del juego tienen mayor autoestima.
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