Fitch Ratings cambió este miércoles a perspectiva negativa la calificación crediticia y monetaria de México.

La firma dijo que, pese a mantener la calificación BBB+, el cambio a negativo refleja el deterioro en el balance de riesgos del perfil crediticio del país.

Destacó que persisten riesgos a la baja relacionados con la postura fiscal de la próxima administración en México, que entrará en funciones el 1 de diciembre.

También se explica que algunas de las promesas de campaña hechas por Andrés Manuel López Obrador, como el aumento en las pensiones, podrían ser difíciles de cumplir, ya que el presupuesto de 2019 no alcanzaría para hacerlo.

La agencia hace énfasis en la decisión de cancelar el nuevo aeropuerto en Texcoco manda una señal negativa para los inversionistas actuales y para los que tenían planeado invertir en México y proyectos futuros.

Fitch Ratings recalca que si bien espera que el próximo gobierno continúe apegándose a la política macroeconómica, aplique disciplinas presupuestarias y la independencia del Banco de México, los riesgos persisten.