El diálogo va por delante en la estrategia gubernamental durante la aprobación de la reforma energética, para lograr acuerdos con el sector privado, pues lo que se busca es generar orden en el mercado eléctrico nacional, sin excluir la participación de las empresas. Así lo afirmó la secretaria de Energía (Sener), Rocío Nahle.
Nahle explicó en una entrevista para Julio Astillero, que el actual Gobierno de México heredó un mercado “perverso” y paralelo, cuya existencia ponía en riesgo la seguridad energética y nacional.
Consideró que la confiabilidad del sistema eléctrico se encuentra en una situación grave debido a que privan las intermitencias y el desorden en las redes de transmisión. Y también señaló que el Centro Nacional para el Control de Energía (Cenace) todos los días tiene decenas de alertas en la red, algo que antes no ocurría.
La ingeniera recordó que, al inicio de la administración la CFE tenía el 38% del mercado y los privados el 62% y actualmente, la proporción ha cambiado a 54% y 46%, respectivamente. Reiteró que no se busca expulsar del país a los privados, ni expropiarles nada, sino establecer un ordenamiento de mercado regulado y una competencia leal.
Advirtió que ven con preocupación experiencias de países como España, “donde el Estado no tiene control sobre nada” en el tema de la electricidad y “las tarifas están altísimas”, lo que afecta a la economía familiar. Esto ocurre, según contó, porque el servicio eléctrico está en manos de empresas, que se rigen por un interés económico.