Como bien sabemos, ni la ciencia ni la tecnología pueden predecir los sismos, sin embargo, sí pueden indicar dónde ocurrirá uno, y nuestro país se ubica en una zona tectónica compleja en la cual suceden movimientos sísmicos de magnitudes importantes.

 

En el caso de Oaxaca, el Sistema Sismológico Nacional (SSN) cuenta con diez observatorios sismológicos complementados con algunas estaciones acelerográficas del Instituto de Ingeniería de la UNAM, los cuales han detectado la causa del sismo del 16 de febrero en la zona costera cercana a Pinotepa Nacional.

 

“La placa de Cocos se está deslizando por la placa de Norteamérica. Se trata de un mecanismo inverso que provoca un sismo interplaca”, detalló en conferencia de prensa Xyoli Pérez Campos, jefa del SSN.

 

Las estaciones sismológicas pertenecientes a diferentes instituciones académicas, son distribuidas en todo el territorio nacional para contribuir con los datos necesarios que le permitan al SSN localizar y estimar la magnitud más certera de los sismos.

 

De esta manera, sabemos que entre cada unidad de magnitud hay una diferencia de 32 veces la energía liberada, por tanto, un sismo de magnitud 7 es 32 veces más pequeño en energía liberada que un sismo de magnitud 8.

 

Pérez Campos refirió que todos los sismos producen dos tipos de ondas o movimientos. En ese sentido, el sismo del 16 de febrero fue aproximadamente 1.5 veces más grande en energía liberada que el del 19 de septiembre de 2017. La diferencia de lo que sucedió en la Ciudad de México está relacionada con la cercanía.

 

“Lo que ocurre en el Istmo es una serie de réplicas producto del gran sismo del 7 de septiembre de 2017, el cual fue un sismo intraplacas, es decir, dentro de la placa de Cocos, y hasta el día de hoy, a esta hora, llevamos 18 mil 382 réplicas producto del sismo del 7 de septiembre”, acotó.

 

De acuerdo con la académica, un sismo de esa magnitud provoca un reacomodo de los esfuerzos en las zonas aledañas, los cuales se expresan a través de las réplicas.

 

Debido a esto, la jefa del Sismológico Nacional señaló que técnicos de dicha entidad salieron a la zona siniestrada para instalar otros instrumentos que midan con mayor precisión las réplicas que ocurren en la zona.

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Con información de: UNAM GLOBAL
Imagen de: UNAM GLOBAL