Las esponjas de maquillaje o popularmente llamadas “beauty blenders”, tienen estilos y funciones diferentes que ayudan a tener una mejor base de maquillaje. Anteriormente, solo existían en forma de triángulo, sin embargo, ahora tienen diferentes formas, tamaños y hasta colores.

El secreto de estas herramientas es el precioso acabado que se consigue, un efecto airbrush que parece como si hubiésemos utilizado un aerógrafo ya que no deja rayas sobre la piel y el acabado es muy natural.

Aunque se pensaría que sirven para lo mismo, la verdad es que los resultados dependen enteramente de la forma de la esponja. A continuación te decimos sus funciones.

Triangular. Esta primera generación de esponjas de maquillaje hacen un buen trabajo, pero las líneas rígidas y puntas afiladas podrían dificultar la distribución equitativa del producto. Pese a que son las más baratas y fáciles de usar no son las mejores.

Reloj de arena. Gracias a sus curvas, esta esponja mejora la aplicación del maquillaje. Y si se sostiene por la parte redonda, la aplicación es más suave.

Mini. Esta pequeña herramienta de maquillaje es multifuncional. Específicamente es utilizada para los detalles, especialmente en áreas pequeñas como los ojos y la nariz. Son perfectas para cubrir imperfecciones tales como las ojeras y alrededor de los labios y la nariz.

BeautyBlender. Youtubers, editores de belleza y artistas de maquillaje se han inclinado por utilizar este tipo de esponja, puesto que es la original. Tiene la forma de una gota de agua o un huevo y su función es aplicar maquillaje líquido, en gel y cremas sin dejar rastro alguno.

Cortada. Aunque da la impresión de que es un error de fábrica y la cortaron a la mitad por accidente, realmente es una esponja multiusos. La parte redonda es buena para la aplicación básica de base y bronceador. Mientras que la punta afilada y recta está hecha para los detalles y el ‘contour’ de productos cremosos.

Con información de: adelamicha
Imagen de: archivo internet