“Yo estoy listo para ser Presidente, yo estoy listo para que juntos logremos el cambio que hoy México necesita”, afirmó Ricardo Anaya previo a su toma de protesta como candidato a la Presidencia de la República de la coalición Por México al Frente.
En el Auditorio Nacional, con un mensaje en el que quedaron en claro los retos de presente y futuro para México en el contexto global y local, el candidato de la coalición que conforman el Partido Acción Nacional, el Partido de la Revolución Democrática y Movimiento Ciudadano dijo que tiene la firme convicción de combatir los tres tumores de ese cáncer que hoy agobia a nuestro país: la corrupción, la violencia y la desigualdad.
Ricardo Anaya explicó que lo que México necesita “no es un Mesías con ínfulas de perdonavidas; lo que México necesita es la aplicación inequívoca de la ley”. Por ello, aseguró que él sí terminará con el pacto de impunidad: “no va a haber venganza, pero si habrá justicia. El que la hizo la va a pagar”.
Expresó que “frente a las ideas antiguas, fracasadas, de Morena, nosotros, todos los aquí reunidos, proponemos un cambio inteligente; un cambio con visión de futuro y, precisamente, con la mirada puesta en el futuro, con profundo patriotismo, juntos, el PAN, el PRD, Movimiento Ciudadano, decidimos formar la coalición electoral Por México al Frente”.
Insistió en que “no debemos, no podemos pretender planear el futuro con las variables del presente, mucho menos con las variables del pasado, es decir, no debeos planear el futuro asumiendo que el mundo va a seguir siendo exactamente como hoy lo conocemos”.
Sobre el primer tumor de México, Ricardo Anaya recordó que “hoy los mexicanos sabemos que la corrupción mata”, como ocurrió con Juan Mena Ruiz y su hijo, Juan Mena Romero, quienes la mañana del 12 de julio de 2017 salieron muy temprano a trabajar, como lo hacen millones de mexicanos en el país y a las 5 de la mañana, cuando circulaban por el nuevo Libramiento de Cuernavaca, al asfalto, bajo las ruedas del automóvil, literalmente se lo tragó la tierra.
“Además de combatir la corrupción, la desigualdad, la violencia, queremos recuperar con dignidad el lugar de México en el mundo”, dijo al dejar en claro que no se pagará ni un peso por el muro que el presidente de Estados Unidos pretende construir.
“Amigas y amigos, es nuestra responsabilidad histórica. Construyamos juntos una patria ordenada y generosa, y logremos una vida mejor y más digna para todas y para todos los mexicanos”, culminó.
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