El episcopado mexicano realizó una petición a la Autoridad Federal, a las Autoridades del Estado de Chiapas y a la Sociedad Civil, sobre la situación que se vive ante el fenómeno migratorio en el país.
A través de un comunicado indicaron que ante el flujo de las caravanas de migrantes, algunos han asumido actitudes de rechazo, indiferencia, xenofobia, discriminación y racismo.
Por lo que reiteraron a la nación que seguirán haciendo todo aquello que esté en sus posibilidades para ser una Iglesia Samaritana que haga menos pesado el camino de los hermanos migrantes. “Hemos solicitado la acción de la Caritas Nacional para que se articule la ayuda que hay en nuestro país, así como motivamos a las diferentes Diócesis de nuestra patria, para que fomenten entre nuestros feligreses un esfuerzo adicional de generosidad a favor de nuestros hermanos”.
Sin embargo, indicaron que les preocupa la situación de la frontera sur, específicamente lo que vive la ciudad de Tapachula, en Chiapas. El inmenso número de migrantes continentales y extra continentales ha rebasado la ayuda de la Iglesia y la acción del Gobierno. Las instalaciones de la estación migratoria Siglo XXI están sobre saturadas lo cual no permite una atención humanitaria, provocando que los migrantes deambulen por la ciudad buscando ayuda.
Por todo ello, “nuestra invitación es para el Gobierno Federal, a fin de que active y monitoree adecuadamente, dadas las circunstancias, un Plan de Emergencia a través de la Autoridad y estructuras gubernamentales
correspondientes, así como solicitar, que se dé una atención humanitaria, especialmente aquellos que deambulan por la ciudad de Tapachula”.
Redacción