La deuda externa de Pemex aumentó, entre 2019 y 2020, seis mil 845.7 millones de dólares, lo que pone en complicada situación el rescate de la paraestatal, como uno de los objetivos de la Cuarta Transformación.
Según el reporte que Pemex turnó a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, su deuda externa ascendió el año pasado 96 mil 598 millones de dólares.
Asimismo, la deuda interna, según el documento, fue de 298 mil 66.1 millones de pesos, cantidad superior en 30 mil 439.2 millones de pesos, respecto al cierre de 2019, que culminó en 258 mil 626.9 millones de pesos.
En tanto, Pemex registró un superávit de tres mil 25.9 millones de dólares por la exportación de petrolíferos, o sea, una bolsa seis veces mayor a lo que consiguió en 2019.
Por otra parte, la empresa del Estado dejó ahorros por cuatro mil 171 millones de pesos en servicios personales de operación; por abastecimiento y gestión de contratos registró ahorros que ascienden a 12 mil 677.1 millones de pesos, y de dos mil 420.8 millones de pesos por alianzas contractuales y estrategias integrales de contratación.