Dentro del presupuesto que se tiene contemplado para el próximo año, el Gobierno de México contempla una nueva reducción a la carga fiscal de Pemex, en busca de mejorar su operatividad. Cabe recordar que hasta lo que va de este gobierno, la paraestatal ha visto una reducción del 25% en sus impuestos.
Para 2022, Hacienda propone una nueva reducción de 14% en la carga de Derecho por Utilidad Compartida (DUC), carga que caería del 54% en el que se ubica hasta este momento al 40%.
“La propuesta planteada permitirá generar un cambio estructural en la carga fiscal de la empresa y liberar recursos de manera permanente que continuarán robusteciendo la posición financiera en el mediano y largo plazo, tanto de Pemex como del gobierno federal”, expuso recientemente Hacienda en el Congreso.
Con esta reducción, se busca que la paraestatal obtenga cerca de 80 mil mdp de ingresos extra. Sin embargo esta posibilidad ha puesto en atención a Pemex, pues expertos y calificadoras internacionales señalan que el riesgo de entregar recursos sin condicionales y sin cuidar su operatividad para que logre mejorar su desempeño, pues en caso contrario este “subsidio” representaría simplemente una perdida más para la empresa.