Un equipo internacional de científicos del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) logró confirmar que Próxima b, descubierto hace cuatro años, es el exoplaneta más cercano a la Tierra a 4,23 años luz. De acuerdo a los expertos, el cuerpo celeste que está en la constelación de Centaurus tiene la particularidad que podría albergar vida.
Se le entrega esta denominación, ya que es un planeta extrasolar, es decir, que orbita una estrella diferente al Sol y que, por lo tanto, no pertenece al sistema solar.
Este exoplaneta fue localizado inicialmente a través de la velocidad radial de la estrella anfitriona, Próxima Centauri, que señaló la posible presencia de Próxima b orbitando, descubrimiento que logró ser ratificado por los expertos.
Para lograr esta confirmación de la presencia de Próxima B, los astrónomos contaron con la ayuda del espectrógrafo más preciso construido hasta la fecha y que denomina: ESPRESSO.
Su nombre es un acrónimo para Echelle SPectrograph for Rocky Exoplanet- and Stable Spectroscopic Observations y que está instalado en el Very Large Telescope (VLT), que está en el Observatorio Paranal sobre el cerro Paranal en la ciudad de Taltal en Chile.
¿Cómo es Próxima B?
Sobre las características de Próxima B, Jonay González Hernández, investigador del IAC y coautor del trabajo, indicó que “es uno de los planetas más interesantes conocidos en el vecindario solar. Su masa tiene la posibilidad de que pueda albergar vida”.
Los resultados de este trabajo contribuyen a esclarecer las condiciones del sistema planetario más cercano a la Tierra y ya han sido incluidos en la revista Astronomy & Astrophysics.
El hallazgo del ESPRESSO en el Very Large Telescope (VLT) permitirá descubrir otros planetas terrestres (incluso de masa muy inferior a la Tierra) en las estrellas del vecindario solar.
“ESPRESSO ha demostrado que puede llegar más allá de lo que ningún espectrógrafo había llegado antes. Se abre un nuevo escenario, ya que habíamos estado limitados a descubrir planetas de varias masas terrestres o, como mucho, alrededor de una masa terrestre en estrellas frías”, aseveró Alejandro Suárez Mascareño, primer autor de la publicación e investigador del Instituto de Astrofísica de Canarias.