Hospedarse en el espacio es la nueva apuesta de la NASA y la empresa Bigelow Aerospace, tras el lanzamiento de una cápsula inflable que fue adjuntada a la Estación Espacial Internacional (EEI).
A través de un cohete lanzado la semana pasada, se transportó la cápsula inflable que ya fue unida a la EEI para hacer pruebas si es habitable, haciendo que sus residentes soporten las temperaturas cambiantes y la radiación cósmica.
En caso de que el llamado Bigelow Expandable Activity Module (BEAM) pasara las pruebas, podría ser el objeto con el que se instalarían las primeras colonias en la Luna y en Marte.
Además, la NASA espera que un éxito de estas cápsulas inflables signifique una mayor población en el espacio.
Mientras tanto, científicos de la NASA en la EEI estarán tomando la temperatura ocho veces por año, así como la radiación y la presión que se ejerce dentro de la cápsula.
Se estima que vivir dentro de las cápsulas inflables costará 28.7 millones de dólares por cada astronauta por un mes.
Hasta el momento, ninguna de las cápsulas inflables han sido habitadas por humanos.