El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, busca que la obra insignia de su gobierno, el Tren Maya, se convierta en el atractivo tecnológico y de progreso para el sureste del país. Sin embargo el tren se ha envuelto en todo tipo de polémicas, una de ellas por ejemplo es que será más caro de lo presupuestado.
Como parte de su planeación, se ha revelado que el Tren Maya no será eléctrico, como se había propuesto, sino que usará diésel, el llamado Ultra Bajo Contenido de Azufre (UBA), mismo que PEMEX en este momento no tiene la capacidad de producir, esto quiere decir que operará con combustible comprado en el extranjero.
Pero los cambios continúan, ya que de acuerdo al análisis costo-beneficio del Tren Maya por parte del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), se presenta una comparación entre los costos de un tren a diésel contra uno eléctrico, y aquí se concluye "que el proyecto planteado sobre la base del diésel es menos costosa que el eléctrico en términos de Costo Anual Equivalente (CAE)".
No obstante no se ha especificado nada acerca del volumen de combustible diésel que requiera la operación habitual del Tren Maya. Por lo que no está claro sobre que base se concluye que el eléctrico es más costoso.
Un plan muy aventurado
Así el pasado 1 de junio, luego de declarar el inicio de la obra, el presidente López Obrador aseguró que el Tren Maya se inaugurará en 2023 con cinco tramos: Palenque, Campeche, Yucatán, Cancún y Tulum. Ya para 2024 se contemplan sumar dos tramos más: Tulum - Carrillo Puerto - Escárcega.
Se señaló también que la compañía que gane la concesión para la operación del Tren Maya podrá adquirir diésel ya sea a PEMEX o compañías privadas. Pero el problema es que PEMEX no tiene actualmente la capacidad de extracción y producción de diésel para una red ferroviaria de este calibre.
Se planeaba que PEMEX pudiera ofrecer el llamado "diésel limpio" o UBA en 2019, sin embargo no se pudo lograr la meta. La Secretaria de Energía, Rocio Nahle extendió este plazo hasta el 1 de enero de 2025, ya que actualmente no fue posible cumplir con la norma NOM-016-CRE-2016 de calidad de los petrolíferos, que exige que el diésel tenga al menos 15 miligramos de azufre por kilo.