Las últimas décadas han propiciado incesantes disputas teóricas sobre los restos arqueológicos descubiertos en Jerusalén, durante el siglo XX. En este caso, la discusión gira en torno al presunto hallazgo del geólogo israelí Aryeh Shimron, quien asegura haber corroborado la hipótesis de que Jesús de Nazaret se casó y tuvo un hijo.
Todo comenzó cuando un osario con la inscripción "Santiago, hijo de José, hermano de Jesús", fue adquirido en Jerusalén por un coleccionista israelí, en la década de 1970. Más tarde, hacia la década de 1980, fue hallada otra cripta, bautizada como 'Tumba de los Diez Osarios', que contenía inscripciones con los nombres de María, Jesús y otros personajes asociados al Nuevo Testamento. En 2007, el cineasta canadiense-israelí Simcha Jacobovici produjo una película al respecto, sugiriendo que la tumba corresponde, efectivamente, a Jesús y su familia.
Hoy, Shimron asegura haber descubierto una conexión entre ambos hallazgos, gracias a la identificación de la relación geoquímica entre las muestras recogidas en ambas criptas. Así, el geólogo sostiene que el osario de Santiago formó parte de la 'Tumba de los Diez Osarios'.
"Este hallazgo pone de manifiesto que el osario de Santiago es auténtico y la 'Tumba de los Diez Osarios' de hecho pertenece a la familia de Jesús de Nazaret", señaló Jacobovici, que está registrando el trabajo de Shimron para una nueva película documental.
Según la opinión del geólogo y el cineasta, el descubrimiento prueba que Jesús de Nazaret fue enterrado en Jerusalén, junto a otras nueve personas, entre las que se menciona a "Judá, hijo de Jesús", y a "María", su presunta esposa.
Información de: Clarín
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