Un reciente estudio reveló que cerca de 300 mil poblanos ingresaron a la pobreza, en un análisis donde no se tomó en cuenta el impacto de la pandemia y en el que no se ha medido el impacto a la educación, atención a la salud pública y canasta básica.
Según Salvador Pérez Mendoza, investigador de la Facultad de Economía de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP); los ajustes de política económica que se aplicaron entre 2018 y 2020 tuvieron un mayor impacto en la caída de ingresos, sobre todo para aquellos que tienen más de seis salarios mínimos.
El experto resaltó que el caso de Puebla es especial, ya que pasó a ser el segundo estado con mayor pobreza, después de Guerrero; aunque la entidad representa la octava economía a nivel nacional con un aporte importante al Producto Interno Bruto (PIB) gracias a su actividad industrial.
En tanto indicó que de acuerdo a cifras del propio Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) en Puebla se calculan 300 mil nuevos pobres que se suman a los que ya estaban clasificados en situación de pobreza extrema; pobreza moderada y pobreza por alimentación.