El experto Antonio Kobayashi Gutiérrez dijo que la depresión en el adulto mayor suele aparecer sin que existan eventos precedentes, como la pérdida de un ser querido o de un trabajo u otras condiciones, y muchas veces puede confundirse con las propias características del envejecimiento.
El geriatra adscrito al Hospital de Especialidades del IMSS Jalisco agregó que las personas mayores no suelen expresar su depresión melancólicamente, "es decir a través del llanto, sino que tienden a manifestarlo de otras formas".
"Por lo que además de pensamientos negativos y tristeza, presentan otros síntomas como apatía, falta de energía, dolores musculares y articulares, desánimo o irritabilidad, falta de apetito, aislamiento, entre otros, que persisten durante varios meses o un tiempo prolongado", indicó.
Añadió que de acuerdo con encuestas, la prevalencia de depresión en adultos mayores del sexo femenino es mayor a la de los varones, siendo de hasta 10 por ciento en las mujeres contra 4 por ciento en los hombres.
El especialista comentó que, en otros casos, como en pacientes con cáncer, la prevalencia de depresión puede alcanzar hasta 60 por ciento, incluidos hombres y mujeres.
Indicó que no obstante, muchas veces los casos se subdiagnostican, toda vez que la persona o sus familiares asocian los síntomas de la depresión con datos propios del envejecimiento como la fatiga, los dolores del cuerpo o el desánimo en general.
Mencionó que un cuadro de depresión severa, podría incluso anteceder a una demencia en el adulto mayor, "de ahí la importancia de identificarla de forma oportuna y brindar un manejo adecuado al paciente".
Subrayó que se debe vigilar la calidad del sueño del adulto mayor, toda vez que el insomnio genera falta de energía que a su vez puede reforzar en ellos ideas negativas como “ya no soy capaz” o “no soy útil”.
Kobayashi Gutiérrez destacó que es importante diferenciar e identificar cuando se trata de un estado de melancolía o de un transitorio trastorno adaptativo, en donde la persona se replantea su papel en la sociedad y en su propia familia ante circunstancias de la vida.
Detalló que el papel que juega la producción del neurotransmisor denominado serotonina en la depresión del adulto mayor es muy importante, toda vez que esta sustancia en el cerebro tiende a disminuir y con ello sobreviene la falta de energía y los pensamientos melancólicos.
Precisó que a fin de prevenirla y coadyuvar en su manejo una vez que se presenta, se debe tratar de mantener vigente al adulto mayor en las actividades familiares y sociales, "a fin de que refuerce su autoestima y auto-concepto sintiéndose útil y valorado".
Resaltó que si el adulto mayor abandonó algunas actividades que anteriormente disfrutaba, la familia puede intentar apoyarle al brindárle facilidades para que pueda retomarlas en la medida de lo posible".
Afirmó que desde que se es joven, se puede planificar la manera en que se quiere envejecer, en términos del autocuidado de la salud y al fortalecer las redes de apoyo con la familia y amigos.
Información:Notimex