La Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, "ENSU" del INEGI, reveló que el 71.9% de los ciudadanos se sienten inseguros en México. Hay temor al momento de usar cajeros automáticos, al entrar y salir del banco, en el transporte público, en las carreteras, en las calles y como hemos visto recientemente incluso dentro de sus autos particulares con los asaltos a automovilistas en la CDMX. Esta sensación de inseguridad creció 4% respecto al 2015. Las ciudades consideradas más peligrosas por la población son Ecatepec, Coatzacoalcos, Veracruz, Acapulco, la zona oriente de la CDMX y Villahermosa. Por el contrario, las menos peligrosas fueron Mérida, Tepic, San Francisco de Campeche, Saltillo y Durango. Por otra parte, la corporación policiaca que según los ciudadanos tuvo el mejor desempeño fue la Marina, seguida del Ejército, la Gendarmería Nacional y la Policía Federal. Esto quiere decir que las corporaciones más cercanas a la gente como las policías estatales y municipales son las que obtienen los índices de desempeño más bajos. Aunque se trata de una encuesta de percepción ciudadana, el problema en algunos lugares como en Veracruz es más que real. La fiscalía de Veracruz confirmó la identificación de los cuerpos de tres jóvenes desaparecidos en Boca del Río y que lo único que querían hacer era visitar un centro comercial, según testigos fueron levantados en un taxi para posteriormente ser asesinados, desmembrados y quemados con ácido sulfúrico. Como siempre no se sabe nada de los responsables y los motivos que tuvieron para realizar un acto como este, y en el colmo del absurdo de este país, padres de otros desaparecidos consideran a los familiares de estos chicos asesinados afortunados por el hecho de por lo menos tener un cuerpo que sepultar, para llevarle flores y rezarle a diferencia de ellos que viven en la zozobra. En vía de mientras y con calidad de parche, enviaron a 3,500 miembros de las fuerzas federales a 8 municipios del Edomex: Ecatepec, Chimalhuacán, Neza, Tlalnepantla, Naucalpan, Tecámac, Tultitlán y Valle de Chalco para tratar de taparle un ojo al macho.
El Gobernador de Veracruz, Javier Duarte, solicitó licencia para separarse de su cargo a 48 días del final de su mandato. Algunos dicen que prepara su graciosa huida, él comentó que Veracruz, ese estado que tanto ama y por el que ha trabajado tan arduamente, no se merece un gobernador de medio tiempo ya que tiene él que atender las denuncias en su contra ante la PGR y la fiscalía general del estado que por cierto comentó que son puras mentiras. Por su parte, el gobernador electo Miguel Ángel Yunes, declaró que el 1 de diciembre, cuando tome posesión de la gubernatura, presentará documentos sobre Duarte que cimbrarán al país y lo acusó de tener un avión listo para escapar. Contrario a lo que muchos opinan, con la licencia de Duarte y la llegada de Yunes a la gubernatura, no se dará por terminada esta etapa de oscuridad por la que ha atravesado uno de los estados más bellos del país.
La semana pasada José Antonio Mead nos pedía corresponsabilidad en el manejo de las finanzas y la deuda del país. Esta semana Peña Nieto aseguró que no es su gobierno el que mueve o transforma al país, ya que su papel no es más que ser un mero facilitador que brinda las condiciones óptimas para que el país se mueva, que son realmente los emprendedores los que mueven al país. Entonces, ¿para qué sirve su gobierno?, ¿para qué les pagamos esos sueldos altísimos y esas prebendas tan onerosas? Quieren hacernos corresponsables de su fracaso, para que entonces nos callemos y dejemos de criticarlos, pues estaríamos criticándonos a nosotros mismos. Podemos olvidar ya aquella famosa frase publicitaria del gobierno de Mover a México, de la misma manera en que nos vimos forzados a olvidar aquello de salvando a México y las fotos estilo James Bond de Peña, Chong y el defenestrado Videgaray. Reina el pesimismo y la sensación de zozobra crece cada día y ahora ¿quién podrá movernos?
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