El Hospital General de México logró el noveno reimplante de manos a un hombre dedicado a la carpintería, quien se mutiló ambas extremidades con una sierra giratoria, y que podrá recuperar 80 por ciento de las funciones.
Los doctores Anabel Villanueva Martínez, Athié Gutiérrez y Raymundo Priego, encabezaron el equipo de cirugía plástica que logró esta proeza en el paciente Alberto Sánchez Garay, de 54 años de edad, y de quien depende la manutención de su esposa e hijos.
El hospital tiene 30 años de experiencia en el reimplante de manos mediante microcirugías, y hasta a la fecha se han realizado nueve de esta magnitud en ambas extremidades.
El doctor Athié Gutiérrez detalló en conferencia de prensa que Alberto Sánchez se mutiló el 9 de mayo, y llegó desde Coyotepec, Estado de México; tras valorarlo en el Servicio de Cirugía Plástica Reconstructiva se decidió operarlo el 3 de junio del año pasado.
Después de recuperarse de la cirugía inició la rehabilitación física y emocional, a fin de recuperar 80 por ciento de las funciones de sus manos, pero no se le dará de alta hasta que pueda reintegrarse totalmente a sus labores. Según su avance la terapia va seis meses a dos años.
“La rehabilitación en este caso particular es mixta, psicológica y funcional, y todavía psicológicamente el impacto ha sido muy grande y se tiene que atender. Está en nuestras manos, lo vamos a seguir rehabilitando física y psicológicamente” hasta que pueda volver a laborar como antes lo hacía.
En tanto, el jefe del Servicio de Cirugía Plástica Reconstructiva, Reymundo Priego comentó que por pérdida de manos, dedos, piernas pies se valoran en este hospital un promedio 17 casos y de estos se logra reimplantar con éxito a 10 pacientes.
Cada año arroja números diferentes, y en el que más se hicieron registra unos 40, pero depende de la gente que está en el Hospital General, así como de la disponibilidad de los pacientes para llegar al hospital.
A su vez, la doctora Anabel Villanueva indicó que en el caso de niños los accidentes más frecuentes, por lo que pierden extremidades o dedos, son los cohetes o cualquier explosivo, y no hay manera de reconstruir y menos de reimplantar.
En edades laborales, abundó el doctor Raymundo Pliego, los accidentes más frecuentes son con sierras giratorias, la causa más común en 70 por ciento de los casos; seguidos por guillotinas, rodillos, molinos de tortillería o de carne, y accidentes automovilísticos.
Empero en los casos de rodillos y molinos no se puede hacer nada a los pacientes, porque estos aparatos destruyen todos los tejidos y nervios.
En otros países, añadió, cambian las estadísticas por la disponibilidad de arma de fuego y accidentes relacionados con actividades.
El médico recomendó que en caso de sufrir un accidente que implique la mutilación de algún miembro éste se preserve adecuadamente y acudir de inmediato al hospital para que pueda tener éxito la microcirugía para reimplantarlo.
“Es un proceso complejo poder reimplantar una extremidad, depende también del mecanismo del trauma”, y los casos ideales son en los que hay un corte nítido, “una gran cantidad de factores que se conjuntan y tiempo de evolución de la lesión”.
Athié Gutiérrez aclaró que para preservar la parte mutilada lo primero que se debe hacer es envolverla en una comprensa limpia y húmeda; meterla en una bolsa de plástico, luego en una hielera y ponerle hielo, para mantenerla fresca pero sin congelar, y acudir de inmediato al hospital.
Información:Notimex