Antes que nada quiero agradecer a tod@s y cada un@ de ustedes por haberse tomado unos minutos en leer mi primer artículo, valoro cada comentario espero estar en el gusto de muchos lectores, Gracias inmensas a Carlos Torres por la oportunidad y tomarme en cuenta; y bueno para continuar, esta semana daré mi opinión sobre la degradación de valores y moral.
Yéndonos años atrás, donde las familias eran en apariencia (porque el degenere siempre ha existido, solo que antes era más calladito) mas "cuadradas", donde se respetaban fielmente a los pilares (abuelos o padres) debido al alto rigor de educación rosando en el miedo de que siquiera te vieran con esos "ojos de pistola" por haber desacatado alguna norma en casa. Sin embargo en tiempos modernos es completamente al revés, simplemente ya no existe el respeto hacia los padres, los niños y adolescentes son cada vez más rebeldes y groseros. ¿A qué se debe? A la TV? Al Internet? Sin duda podríamos echarle la culpa hasta a la pobre mosca que nos pasó por enfrente, pero aquí el punto es poner remedio pronto porque la situación ya está fuera de control, lo podemos ver en los actos vandálicos de últimos tiempos, en el hecho de que cada vez hay más niñas menores de 15 años embarazadas, en adolescentes con educación escolar trunca por desatención, etcétera.
Es o debería ser alarmante la despreocupación de los padres de hoy en día, y como mencione, años atrás era un régimen bastante burdo y hasta cruel; pero no se trata que volvamos a ello pero si a dar una educación bien basada en valores, moral, principios. Muchos tienden a asociar la palabra "Educación" con la escuela y creen que por terminar una carrera profesional ya tienen la educación más amplia y casi casi han conquistado el mundo; por supuesto que tener con que sobresalir en la vida y ámbito profesional es importante y básico, pero también sabemos que tener educación moral es importante es lo que te define ante los demás "La Primera Educación Empieza En Casa" y la nulidad de ello lo vemos en los actos que cada vez son más crueles, sin escrúpulos.
Solo analicen situaciones trágicas donde se han visto involucrados adolescentes y jóvenes, los primeros que salen a llorar y pedir justicia son las mismas personas que desde un principio no pusieron un alto a tiempo. Este tema es complicado porque podríamos opinar tan hipócritamente y darnos golpes de pecho pero no se trata de eso, si no de que lo padres de familia (no importando la situación en la que esté constituido el hogar) pongan más atención a los hijos, establecer reglas que sean flexibles para ambas partes, hoy en día es imposible mantenerlos en una "burbuja de cristal"; ambos pueden aprender uno del otro, de que volvamos a lo básico.
Padres: mente abierta, den libertad mas no libertinaje, forjen seres de bien para el futuro, pongan atención a sus amistades y sin insultos o golpes hagan entender lo que les conviene o no, no den a manos llenas porque los hacen inútiles o atenidos, no los enaltezcan porque los hacen prepotentes, cimenten que toda acción lleva una reacción y deben saber afrontar consecuencias con su debida responsabilidad, ante negativa de parte de los hijos, no queda mas remedio que dejarlos que se arriesguen y así aprendan a que si bien, la vida no es fácil tampoco es un asco; escúchenlos, funden su seguridad y autoestima, exalten sus talentos, enséñenlos a tener criterio. Las groserías, malos tratos solo provocan que el hijo (no importa la edad) se autodenigre y tome caminos errados.
Hijos: acudan a sus padres, valoren a sus pilares familiares, aprendan de la vida en combinación con los consejos de sus padres.
Imaqen de: Archivo Internet