Una nueva investigación, publicada recientemente en la revista Atmospheric Environment, acaba de revelar que los niveles de contaminación atmosférica al interior de los automóviles son mucho más altos de lo que se creía anteriormente, particularmente durante las horas pico del tráfico.
“Encontramos que es probable que la gente tenga un doble golpe de exposición en términos de salud durante las horas pico del viaje hacia el trabajo“, indicó Michael Bergin, profesor de ingeniería civil y ambiental en la Universidad de Duke, en Durham, N.C.
Para concretar el estudio, el experto y sus colegas instalaron sensores dentro de unos 30 automóviles que iban y venían desde el centro de Atlanta. Durante los 60 viajes que monitorearon, descubrieron que los niveles de algunos tipos de material particulado de la contaminación en los automóviles fueron dos veces más altos que los niveles detectados por los sensores de carretera ampliamente utilizados.
Los científicos también hallaron que la contaminación contenía el doble de la cantidad de sustancias químicas que causan estrés oxidativo, que se cree está involucrado en el desarrollo de muchas enfermedades, incluyendo afecciones respiratorias y cardiacas, cáncer y algunos tipos de enfermedades neurodegenerativas.
“Si estos productos químicos son tan malos para la gente como muchos investigadores creen, entonces los viajeros deberían repensar seriamente sus hábitos de conducción“, añadió Bergin en un comunicado de prensa de la universidad.
Las partículas de aire contaminado pueden incluir polvo, polen, hollín, humo y gotas de líquido.
La exposición química fue mayor a la observada en estudios previos que utilizaron monitores de aire en carretera, independientemente de la velocidad, el tipo de ruta o si las ventanas estaban abiertas o cerradas, dijeron los especialistas.
Cabe destacar que las especies de oxígeno reactivo encontradas por esta investigación pueden hacer que el cuerpo produzca productos químicos para combatir el oxígeno reactivo. Las partículas causan la misma respuesta. En combinación, la exposición desencadena una reacción excesiva, que puede ser destructiva para las células sanas y el ADN.
Se cree que el estrés oxidativo desempeña un papel en una amplia gama de enfermedades, incluyendo el síndrome de Asperger, TDAH, cáncer, enfermedad de Parkinson, enfermedad de Alzheimer, aterosclerosis, insuficiencia cardiaca y ataque al corazón, anemia falciforme, autismo, infección, síndrome de fatiga crónica y depresión.
Según Bergin, todavía existe mucho debate sobre qué tipos de contaminación causan la mayor preocupación para la salud y qué los hace tan peligrosos. “Pero la conclusión es que conducir durante las horas pico es aún peor de lo que pensábamos“.
Vía: Duke University – Pratt School of Engineering
Imageb: Animal Político