Sólo pocas células cancerosas son capaces de formar tumores secundarios, por lo que es complicado aislarlas y estudiarlas, sin embargo investigadores estadunidenses encontraron que las células menos “pegajosas” son más propensas a migrar e invadir otros tejidos.
Científicos de la Universidad de California estudiaron las células cancerosas dentro de un tumor para tratar de identificar a las que son metastásicas y reconocer cómo se propagan hacia otras partes del cuerpo, pues hasta ahora los marcadores biológicos universales para hacerlo han sido limitados.
Los investigadores utilizaron características físicas y no biológicas, y lograron identificar diferencias mediadas por la fuerza de adherencia entre las células metastásicas y las que no lo son, de acuerdo con los resultados del estudio publicados en la revista especializada Biophisycal Journal.
Las células que se propagan a otros tejidos exhiben una notable heterogeneidad y ligereza en su fuerza de adhesión, a diferencia de sus homólogas no metastásicas que muestran una adherencia fuerte que les impide separarse y formar tumores secundarios.
Para identificar ambos tipos de células, el equipo de científicos construyó un dispositivo de disco que gira con el cual fueron capaces de medir la fuerza de adhesión de las células de cáncer de mama y de próstata.
Hasta ahora los intentos por encontrar un marcador que identificara a las células metastásicas en diversos tipos de tumores habían sido infructuosos, sin embargo este procedimiento se encuentra aún en una fase experimental temprana, admiten los investigadores.
El grupo de científicos afirman sin embargo que pasarán varios años antes de comenzar a efectuarse pruebas clínicas, pero representa una esperanza para lograr identificar las células matastásicas en pacientes con cáncer, a fin de proporcionarles un tratamiento más agresivo.
Información:Notimex