La diputada Dolores Padierna Luna (Morena) afirmó que en la Ley de Ingresos no se aumentan los impuestos ni la deuda, lo que muestra una gran eficiencia administrativa y un gran esfuerzo de austeridad republicana por mantener un nivel de ingresos.
“Aunque el presupuesto es de 9 billones, no todo lo puede gastar la administración pública porque gran parte de esos recursos están etiquetados para el gasto no programable, como es el caso de todo el gasto federalizado de los estados y municipios; las pensiones, que son casi 2 billones de pesos; y la deuda, que es un billón y medio, es decir, se reduce a 4.5 billones. Eso es lo que tiene el país para el próximo año y salir adelante”, indicó.
En declaraciones a representantes de medios de comunicación, Padierna Luna explicó que los 4.5 billones de pesos se distribuirán en programas sociales, inversión física neta y en proyectos productivos que generarán ganancias importantes para el país y desarrollo económico.
Subrayó que la inversión en proyectos productivos será de casi un billón de pesos, la cual es una cifra muy importante, ya que en el “neoliberalismo se consideraba un estorbo y era cada vez menor para darle más oportunidad a la inversión privada; este concepto no funcionó porque no vimos las obras en ningún lado. Ahora hay un incremento importante en la inversión pública, pero que se ven las obras”.
Consultada sobre las medidas que tomará la Cámara de Diputados para tratar de que este pago de deuda no absorba todo lo demás del presupuesto, Padierna Luna aseguró que es una deuda moderada y responsable que se va a destinar a proyectos que generan ingresos para su pago y solventar su saldo histórico.
Explicó que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo señala en la Ley de Ingresos el concepto de deuda interna y deuda externa, conforme lo estipula la Ley General de Deuda, la cual establece que la deuda pública sólo se puede utilizar para proyectos de inversión que generen su propio pago y eso sólo puede hacerse a través de la inversión y el saldo histórico de la deuda.
La diputada dijo que la deuda del expresidente Andrés Manuel López Obrador se compara con lo que se gastó en los pasados gobiernos de Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón Hinojosa, pues “es mucho menor, o sea, es un gasto moderado, y lo que se propone la Presidenta es reducir saldo histórico todavía más, aunque nominalmente sea mayor.
“Lo que cuenta es la capacidad de pago de un país y la capacidad de pago de un país se mide como proporción del PIB (Producto Interno Bruto) y también como porcentaje de sus ingresos propios”, reiteró.
Redacción