Tras el escándalo a nivel mundial que se ha desatado en el fabricante automotriz Volkswagen por alterar los resultados de las emisiones en sus autos con motores diésel, las autoridades alemanas han tomado con el transcurrir de los días más protagonismo.
Este jueves, la fiscalía alemana ordenó realizar un cateo en busca de los registros de las emisiones diésel.
La fiscalía de Braunschweig dio a conocer que dichos allanamientos se llevaron a cabo el jueves en Wolfsburg, donde Volkswagen tiene su sede, y en otros lugares.
En un comunicado, dijeron que el objetivo de la búsqueda era encontrar “documentos y dispositivos de almacenamiento de datos” que podrían identificar a los implicados en la supuesta manipulación y revelar la forma en que se llevó a cabo.