La madre Teresa de Calcuta será santa de la Iglesia católica gracias a la aprobación del papa a un milagro, una curación inexplicable atribuida a la intercesión de la monja fallecida en 1997.
Según informó este viernes la sala de prensa del Vaticano, Francisco recibió la víspera en audiencia privada al prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el cardenal Angelo Amato, quien le sometió a su consideración el expediente de la religiosa.
Con la autorización del pontífice se cumplió el último paso antes que la beata pueda ser declarada como santa, lo cual deberá ser certificado por el mismo líder católico durante una ceremonia cuya fecha aún no ha sido establecida.
Según trascendió la celebración será en la Plaza de San Pedro en el próximo mes de septiembre, en medio del Año Santo de la Misericordia, pero la Santa Sede aún no lo ha confirmado.
La madre Teresa, cuyo nombre original era Anjeze Gonxhe Bojaxhiu, nació el 26 de agosto de 1910 en Skopje, una localidad de la Albania, y falleció en la ciudad india de Calcuta el 5 de septiembre de 1997.
Desde muy joven sintió el llamado a la vida religiosa y en 1950 fundó la congregación de las Misioneras de la Caridad cuya misión es aquella de hacerse cargo de los más pobres entre los pobres y de todas las personas no queridas.
Las primeras adherentes fueron 12 jóvenes y para ellas la madre Teresa estableció un simple hábito blanco con líneas azules porque era el más barato y porque reflejaba los colores de la casta de los intocables, la más pobre de India.
Por su incansable trabajo a favor de los pobres obtuvo el Premio Nobel de la Paz en 1979 y tras su muerte fue proclamada beata por el Papa Juan Pablo II el 19 de octubre de 2003.