A través de una publicación del periódico “El Financiero” se reveló que más allá del discurso de la honestidad y la transparencia, la cúpula nacional de Morena dobletea en chambas y salarios.
Y para ejemplo basta con saber que algunos de los personajes cercanos al dos veces fallido candidato presidencial (administrativamente hablando) cobran en la dirigencia nacional de MORENA y además en el grupo parlamentario recién creado en Palacio Legislativo de San Lázaro.
De acuerdo al Financiero, Marco Antonio Medina Pérez, secretario de Finanzas del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena, es al mismo tiempo el coordinador administrativo de la recién creada fracción parlamentaria de ese partido en la Cámara de Diputados, y quien firma todo documento interno en ambos lados.
mil pesos al mes, el sueldo que él se autoriza es de entre 30 mil y 40 mil; y en San Lázaro su salario es de más de 90 mil, aunque se aclara que el compromiso de ellos –por lo menos públicamente– es que la mitad se dona al partido, revela personal de Morena en la Cámara de Diputados.
A mediados de septiembre pasado, apenas después de las fiestas patrias, el tabasqueño Octavio Romero Oropeza, el más cercano asesor y el de mayor confianza y lealtad de Andrés Manuel López Obrador, se presentó ante la batería de asesores de la bancada de Morena en el Palacio Legislativo de San Lázaro como el coordinador de asesores del grupo.
Romero Oropeza –quien fue nada menos que el oficial mayor de López Obrador cuando fue jefe de Gobierno del Distrito Federal– es hoy asesor en el Movimiento de Regeneración Nacional, del cual –aseguran en la coordinación de Morena en San Lázaro– recibe entre 30 mil y 40 mil pesos, aunque en la página de transparencia no figura.
Estas coordinaciones son, en cada grupo parlamentario, los que más cobran, los más fuertes soportes de cada partido, detrás del coordinador.
Marco Antonio Medina Pérez y Octavio Romero Oropeza, más que ser los dos puntales centrales de la coordinadora de la bancada de Morena, la veracruzana Norma Rocío Nahle García, ambos se encuentran en plena campaña electoral en busca de la presidencia municipal de sus respectivos lugares de origen.
El propio equipo de asesores de Morena reveló que Romero Oropeza sólo acudió a la Cámara de Diputados el día de su presentación y no ha vuelto, debido que se encuentra en plena campaña por el municipio de Centro, Tabasco, para la elección extraordinaria que viene, luego de que se anuló la efectuada en junio pasado.
“Asesora a distancia; cobra casi 100 mil pesos pero no viene”, señalan los asesores. Su trabajo en San Lázaro lo hace, en tanto, un coordinador de procedimientos técnico-legislativos que otorga la Secretaría General de la Cámara de Diputados, que es personal de estructura de Cámara, con un salario de no más de 60 mil pesos, y que, incluso, es considerado por diversos legisladores como simpatizante del PRD, no de Morena.
El administrador Marco Antonio Medina también “se ausenta mucho” del grupo parlamentario –denuncian–, ya que trabaja en busca de la candidatura de Morena a la presidencia municipal de Tuxpan, Veracruz, con el aval de la coordinadora Rocío Nahle, originaria del municipio de Coatzacoalcos.