Según cálculos de trabajadores que operan la vía de peaje que conecta al Distrito Federal con Acapulco, la toma de tres de las cinco casetas de la Autopista del Sol por parte de los miembros de la CETEG, significó en días recientes a la disidencia magisterial y a normalistas ingresos promedio de 200 mil pesos cada hora.
La toma de cada una de las casetas de la Autopista del Sol ocurrió en uno de los momentos de mayor afluencia por el regreso al Distrito Federal de los vacacionistas de fin de año.
El cálculo del beneficio económico por las tomas fue hecho por empleados de Caminos y Puentes Federales (CAPUFE), quienes laboran en esas casetas.
Por ejemplo, en Palo Blanco había un flujo de 81 autos entrando y saliendo de Acapulco por minuto el pasado fin de semana, lo cual representó cuatro mil 860 unidades por hora, que multiplicado por 50 pesos significó ingresos de 243 mil pesos por hora, además del boteo de manifestantes en camiones.
Desde el 4 de diciembre pasado, el gobierno federal anunció que no permitiría la toma de casetas de peaje rumbo a Acapulco o viceversa, para proteger a los turistas de la temporada invernal.
CETEG hace negocio en la Autopista del Sol
Un grupo de maestros de la CETEG volvió a las casetas de la Autopista del Sol para cobrar el peaje en supuesto apoyo a los padres de los normalistas desaparecidos.
A las casetas de La Venta y Metlapil llegaron desde las 7:00 h y en la caseta de Palo Blanco a las 10:00 de la mañana.
En la Caseta de La Venta, en la entrada de Acapulco, fueron casi nueve horas las que los maestros de la CETEG y normalistas cobraron alrededor de dos millones 187 mil pesos, de acuerdo con los trabajadores.
Mientras que en la caseta de Palo Blanco los inconformes estuvieron alrededor de ocho horas, lo cual representaría en ingresos un millón 944 mil pesos durante la jornada.
En la caseta de Metlapil, que comunica la zona de Acapulco Diamante y conecta de manera directa a la salida de la Caseta de La Venta no se cuenta con el aforo de los vehículos, pero calculando que solo fuera 20 por ciento del aforo de la autopista, se recaudarían cerca de 400 mil pesos.
Los manifestantes, quienes iban con el rostro cubierto, señalaron que el dinero se utiliza para mantener a los padres de familia de los 42 estudiantes desaparecidos y para costear las protestas a realizar en la Ciudad de México.
Los miembros de la CETEG y normalistas también colectaron dinero con los pasajeros de los autobuses que transitaban por la Autopista del Sol.
En varias ocasiones, los padres de familia han asegurado que ellos no han recibido recursos de lo que se recauda en las casetas.
Debido a esto, al momento que se retiraban los normalistas llegaron a la caseta otras organizaciones —como grupos de autodefensa— quienes cobraron también en la caseta de Palo Blanco.
El pasado 4 de diciembre, el presidente Enrique Peña Nieto anunció la reducción de otro 50 por ciento al ya implementado en las cuotas de la Autopista del Sol en apoyo al turismo. También se garantizó mantener libre la Autopista del Sol, que era una de las demandas principales de los prestadores de servicio en Acapulco.
En noviembre, el alcalde de Acapulco, Luis Walton, informó que el gobierno estatal pactó con la CETEG evitar bloqueos durante el periodo vacacional.
Se pierden 850 mil pesos por cada hora de bloqueo
La recurrente toma de plazas de cobro por parte de maestros de la CETEG y normalistas de Ayotzinapa provocó pérdidas por alrededor de 850 mil pesos por cada hora que los manifestantes impidieron que en tres de las cinco casetas de cobro de CAPUFE de la autopista México–Acapulco se realizaran la recaudación del peaje correspondiente.
Fueron 17 días de bloqueo considerados del 19 de diciembre del 2014 al 4 de enero del 2015.
CAPUFE dio a conocer que durante ese periodo, en la autopista México–Acapulco se registró un flujo de dos millones 180 mil vehículos, lo que implica un promedio de 94 cruces por minuto, siendo el 20 de diciembre el día de mayor aforo, con un millón 677 mil unidades.
De haberse presentado una circulación normal, el organismo habría obtenido —en el lapso mencionado— alrededor de 545 millones de pesos, cifra que representa únicamente 25 por ciento de los ingresos que se hubieran obtenido con una tarifa regular, que es de mil pesos por auto. Hay que recordar que el paso por esa vía tiene un descuento ordenado por el gobierno federal.
“La toma de casetas mermó tal volumen de ingresos”, reconocieron fuentes del organismo.
Las autoridades determinaron que durante las vacaciones el costo de todo el trayecto desde la Ciudad de México sería de únicamente 250 pesos, es decir, 125 pesos de ida y 125 pesos de regreso para favorecer el turismo hacia ese destino turístico.
En al menos tres casetas se presentaron recurrentes manifestaciones que, en forma simultánea, suman pérdidas de 850 mil pesos por hora durante el lapso en el que los manifestantes impidieron el cobro del peaje, de acuerdo con información oficial.