Pese a que la Ley de Seguridad propuesta por el Presidente Andrés Manuel López Obrador permite que los militares y marinos apegarse a la Guardia Nacional y su permanencia hasta marzo del 2024 en labores de seguridad pública, esta mañana el propio mandatario reculó y anunció que buscaría cambiar las leyes secundarias de su propuesta inicial para que las fuerzas armadas permanezcan en labores de seguridad pública pasando la fecha establecida en la constitución.

Desde Palacio Nacional, el mandatario mexicano justificó que es necesario el alargue de la permanencia de las fuerzas armadas en labores de seguridad pública debido a la realidad que ha enfrentado el país en los últimos meses:

“Sí, que se pueda constituir la Guardia Nacional dependiendo de la Secretaría de la Defensa pero también que Marina como Defensa contribuyan, apoyen, en las labores de seguridad pública. Es que era y sigue siendo, la concepción para el pensamiento, era normal de que estuviesen asaltando enfrente de un cuartel militar a un ciudadano y no pudiese constitucionalmente intervenir el Ejército porque estaban impedidos…. Se desata la guerra contra el narcotráfico y lo principal ya no es la amenaza de que nos van a invadir, el principal objetivo era la seguridad de los mexicanos. Vamos a consolidar la Guardia Nacional y al mismo tiempo buscar en cuestiones estratégicas para proteger a la población… Hay que prolongar más el mandato lo que establece el transitorio. Lo ideal es una reforma constitucional, pero tenemos que buscarle la forma porque nos están bloqueando, en vez de ayudar hay la intención de que no podamos hacer nada y no les importa que se trate de asuntos que tienen que ver con la seguridad, no se puede politizar eso. Ojalá y cambien de modo de parecer y de actitud, pero si no cambian nosotros tenemos que buscar la forma”, justificó el tabasqueño.

De acuerdo a la actual legislación que da pie a la creación de la Guardia Nacional en 2019 y la cual fue propuesta por el presidente y aprobada incluso con el apoyo de la oposición, la Guardia Nacional tendría un mando civil y la operación y administración de esta estructura de seguridad tendría una duración de 5 años como lo especifica el mandato constitucional aprobado por el legislativo:

“Durante los cinco años siguientes a la entrada en vigor del Decreto, en tanto la Guardia Nacional desarrolla su estructura, capacidades e implantación territorial, el Presidente de la República podrá disponer de las Fuerzas Armadas permanente en tareas de seguridad pública de manera extraordinaria, regulada, fiscalizada, subordinada y complementaria”

Sin embargo, ante los acontecimientos registrados en los últimos meses donde el crimen organizado ha recrudecido la violencia incluso atentando contra la población civil, el primer mandatario se topó con la realidad que vive el país desde hace décadas.

Redacción